Las fiestas patronales de San Cibrao, en Carballiño, han concluido con un superávit de 2.800 euros.
Así lo declaró ayer la comisión, que presentó el balance de esta edición de 2011, anunciando que el remanente quedará en depósito para el próximo año. Los responsables de la organización afirman que fue posible 'gracias a la colaboración y la implicación de los vecinos de Carballiño, así como de los empresarios y hosteleros de la villa'. El coordinador de esta comisión, José Luis Alves, valoraba que 'han sido en general una buenas fiestas, sobre todo por que los vecinos han participado al máximo en todas las actividades que convocamos y, también, porque el tiempo acompañó'.
Las cuentas se saldan con un capítulo de ingresos de 86.575 euros, y un capítulo de gastos de algo más de 84.000 euros, 'aunque no están cerradas definitivamente ya que aún quedan algunas aportaciones por cobrar, por lo que posiblemente el remanente será mayor', señalaba Alves. Además, añadía que 'el dinero queda para las fiestas del año próximo, por lo tanto pedimos a los responsables que también piensen en el tiempo, y que cuanto antes se empiece a trabajar, mejor'.
La comisión hizo un balance positivo de la programación, aunque reconoció que el pueblo pide más bandas de música.
Las cuentas se saldan con un capítulo de ingresos de 86.575 euros, y un capítulo de gastos de algo más de 84.000 euros, 'aunque no están cerradas definitivamente ya que aún quedan algunas aportaciones por cobrar, por lo que posiblemente el remanente será mayor', señalaba Alves. Además, añadía que 'el dinero queda para las fiestas del año próximo, por lo tanto pedimos a los responsables que también piensen en el tiempo, y que cuanto antes se empiece a trabajar, mejor'.
La comisión hizo un balance positivo de la programación, aunque reconoció que el pueblo pide más bandas de música.
