El jabalí ha estado revolviendo la tierra en los jardines de la iglesia de A Veracruz. El jardinero municipal se ha llevado una gran sorpresa porque asegura que nunca ha ocurrido nada semejante. Pero allí estaban las huellas inconfundibles de este animal que cada vez es menos salvaje, porque se aproxima habitualmente a los núcleos de población y sin ningún tipo de reparo.
El cerdo no es que causara estragos en la zona ajardinada de este entorno urbano, posiblemente porque no debió encontrar la comida que buscaba, pero lo que no deja de ser chocante es que se pasee durante las noches y madrugadas por el mismo centro de una villa como Carballiño, porque los residentes en las localidades del rural, sí que están habituados a verlos muy próximos a las casas, a plena luz del día, y lo que es peor, en demasiadas ocasiones arrasando sus huertas, especialmente con cultivos como la patata o el maíz.
'Cualquier día los encontramos en la Plaza Mayor', apuntaba ayer la alcaldesa en funciones, Pilar Caride, que había sido informada por el jardinero de la presencia tan próxima del cerdo salvaje. Hace aproximadamente dos años, los avistamientos habían sido numerosos en la rotonda de la 'casa azul', en el cruce Catro Camiños y de forma muy asidua en el Parque municipal, entre otros lugares. Incluso el cabo de la Policía Local, Francisco Valeiras, recuerda una ocasión en que los clientes de una cafetería habían visto cruzar a tres ejemplares entre las calles Serra Martiñá y Rúa Bos Aires. Circularon por la acera y atravesaron la calzada haciendo caso omiso a las personas que los observaban atónitas desde la terraza del bar.
'Son inofensivos, porque se trata de varias xeracións que xa se criaron cerca dos pobos e en contacto coa xente, cando entran nun núcleo de poboación é para buscar comida, por eso fozan nos xardíns e nas rotondas e incluso se acercan ás terrazas das cafeterías para comer as cascas dos cacahuetes', indicaba Valeiras.
La Policía está recibiendo algunos avisos sobre la presencia de los jabalíes en calles y carreteras periurbanas, pero desde hace semanas se habían vuelto a aproximar tanto al centro urbano, hasta el punto de llegar a los jardines de A Veracruz A los agentes lo único que les preocupa es la circulación en algunas carreteras como en la del Eixo do Ribeiro en la que ya han provocado accidentes de tráfico.
'Cualquier día los encontramos en la Plaza Mayor', apuntaba ayer la alcaldesa en funciones, Pilar Caride, que había sido informada por el jardinero de la presencia tan próxima del cerdo salvaje. Hace aproximadamente dos años, los avistamientos habían sido numerosos en la rotonda de la 'casa azul', en el cruce Catro Camiños y de forma muy asidua en el Parque municipal, entre otros lugares. Incluso el cabo de la Policía Local, Francisco Valeiras, recuerda una ocasión en que los clientes de una cafetería habían visto cruzar a tres ejemplares entre las calles Serra Martiñá y Rúa Bos Aires. Circularon por la acera y atravesaron la calzada haciendo caso omiso a las personas que los observaban atónitas desde la terraza del bar.
'Son inofensivos, porque se trata de varias xeracións que xa se criaron cerca dos pobos e en contacto coa xente, cando entran nun núcleo de poboación é para buscar comida, por eso fozan nos xardíns e nas rotondas e incluso se acercan ás terrazas das cafeterías para comer as cascas dos cacahuetes', indicaba Valeiras.
La Policía está recibiendo algunos avisos sobre la presencia de los jabalíes en calles y carreteras periurbanas, pero desde hace semanas se habían vuelto a aproximar tanto al centro urbano, hasta el punto de llegar a los jardines de A Veracruz A los agentes lo único que les preocupa es la circulación en algunas carreteras como en la del Eixo do Ribeiro en la que ya han provocado accidentes de tráfico.
