Peatones y automovilistas se despistan en el centro de Carballiño tras la instalación de semáforos en la avenida Conde Vallellano promovida por la Concejalía de Tráfico para conseguir una circulación vial más fluida. Así, los primeros cruzan el paso de cebra sin pulsar el botón que habilita la luz verde, mientras los segundos se dirigen en uno u otro sentido sin percatarse de la señal roja de parada. Agentes de la Policía Local se dedican durante la jornada a instruir a los ciudadanos para evitar accidentes.
Señora, mire para o semáforo, aconseja el cabo de la Policía Local de Carballiño, Casimiro Otero, a una mujer que cruza el paso de cebra que comunica las calles Rosalía de Castro y Curros Enríquez. Y es que esta transeúnte atraviesa la avenida Conde Vallellano en el momento en que las parpadeantes luces de color ámbar permiten la circulación de automóviles. Son las doce del mediodía y un conductor aparca su vehículo justo delante del carril peatonal. Leve o seu coche de aquí, e ande a pé que é máis sano, le espeta el agente policial.
Una hora más tarde, más de 20 personas esperan a un lado y a otro de la avenida para cruzar -en ese momento hay mucho tráficohasta que un experto niño les grita a los de enfrente: Tienen que apretar el botón, porque así no pasamos. Dicho y hecho. La solución para los peatones está en pulsar el dispositivo colocado en los semáforos y que habilita durante un máximo de 15 segundos un recorrido seguro de 12 metros entre una y otra acera, con las luces en rojo para los coches y verde para los peatones. Además, un sistema de sonido facilita la acción para las personas con discapacidad visual.
Atascos
Sin embargo, hay automovilistas que tampoco se percatan de la nueva instalación semafórica y los agentes se ven obligados a detener su marcha. Dos semáforos que la Concejalía de Tráfico colocó con el fin de mejorar la fluidez del tráfico, evitando un paso continuo de peatones en el céntrico cruce que producía atascos. A xente aínda vai tardar un tempo en acostu marse a esta instalación, xa que hai máis de 15 anos que se suprimiron os semáforos no casco urbán e por iso é unha novidade para peóns e conductores, apunta Casimiro Otero.
Por este motivo, los agentes permanecen durante la práctica totalidad del día en el entorno con el objetivo de evitar cualquier tipo de accidente e instruyendo a los ciudadanos para que sigan las normas viales.
A última hora de la tarde de ayer, y un día después de su puesta en marcha, la mayoría de las personas que se acercaban a la avenida Conde Vallellano ya le tenían cogido el truco al sistema y apretaban el botón para poder atravesar el paso de cebra. También hay críticas sobre la ubicación de los dos semáforos, debido a que están separados a una distancia de 20 metros, si bien cuentan con el visto bueno de técnicos de Tráfico.
Una hora más tarde, más de 20 personas esperan a un lado y a otro de la avenida para cruzar -en ese momento hay mucho tráficohasta que un experto niño les grita a los de enfrente: Tienen que apretar el botón, porque así no pasamos. Dicho y hecho. La solución para los peatones está en pulsar el dispositivo colocado en los semáforos y que habilita durante un máximo de 15 segundos un recorrido seguro de 12 metros entre una y otra acera, con las luces en rojo para los coches y verde para los peatones. Además, un sistema de sonido facilita la acción para las personas con discapacidad visual.
Atascos
Sin embargo, hay automovilistas que tampoco se percatan de la nueva instalación semafórica y los agentes se ven obligados a detener su marcha. Dos semáforos que la Concejalía de Tráfico colocó con el fin de mejorar la fluidez del tráfico, evitando un paso continuo de peatones en el céntrico cruce que producía atascos. A xente aínda vai tardar un tempo en acostu marse a esta instalación, xa que hai máis de 15 anos que se suprimiron os semáforos no casco urbán e por iso é unha novidade para peóns e conductores, apunta Casimiro Otero.
Por este motivo, los agentes permanecen durante la práctica totalidad del día en el entorno con el objetivo de evitar cualquier tipo de accidente e instruyendo a los ciudadanos para que sigan las normas viales.
A última hora de la tarde de ayer, y un día después de su puesta en marcha, la mayoría de las personas que se acercaban a la avenida Conde Vallellano ya le tenían cogido el truco al sistema y apretaban el botón para poder atravesar el paso de cebra. También hay críticas sobre la ubicación de los dos semáforos, debido a que están separados a una distancia de 20 metros, si bien cuentan con el visto bueno de técnicos de Tráfico.
