La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) acondiciona 5,6 kilómetros en el río Arenteiro con una inversión que superará los 20.000 euros. En este momento, una brigada compuesta por cuatro operarios especializados y un capataz trabajan en el núcleo carballinés de Paradela.
En la inspección previa de la zona de actuación se detectó abundante vegetación arbórea y arbustiva, y un importante número de árboles con riesgo de caída sobre el cauce, lo que podría dificultar el normal discurrir de las aguas y provocar tapones en las infraestructuras de paso e inundaciones en las fincas colindantes.
Para evitar estos problemas, se trabaja en el acondicionamiento y limpieza del cauce en dominio público hidráulico (DPH) y zona de servidumbre, incluyendo la poda y clareo de ramas bajas, tala, troceado, apilado y retirada de los árboles secos presentes en el tramo de actuación.
Los restos vegetales son retirados de la zona y se transportan al gestor autorizado; en el caso alisos, se aplican las medidas o recomendaciones profilácticas con el objeto de evitar la propagación de Phytophthora Alni.
"La ausencia de lluvias nos permite continuar trabajando en los ríos, con el objetivo de aminorar los riesgos de inundaciones y avenidas en momentos de intenso caudal", ha explicado José Antonio Quiroga Díaz, presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, que continúa los trabajos de limpieza de ríos en la provincia de Ourense, encargados a la empresa Tragsa, que se prorrogarán hasta final de año y en los que se invierten más de 900.000 euros.
