En la vista oral, que se abre hoy, estarán como demandados una aseguradora, Fenosa y la comunidad
El Juzgado de Carballiño inicia hoy el juicio ordinario por la vía de lo Civil relativo al incendio que se produjo en noviembre del año 2011 en las galerías Magariños de Carballiño, y que se prolongará durante el día de mañana y el próximo jueves. Son siete los denunciantes que reclaman indemnizaciones a la comunidad del edificio en donde tuvo lugar el incendio, o a la compañía aseguradora del Concello de Carballiño o también a Gas Natural Fenosa, y en algunos de los casos a los tres.
Los denunciantes consideran que pudo haber negligencia en la intervención de los servicios de extinción y por eso responsabilizan indirectamente al Ayuntamiento, si bien la reclamación va dirigida a la aseguradora. También consideran que el cuadro eléctrico de contadores, en donde prendió el fuego, no estaba en las condiciones adecuadas que supuestamente deberían mantener la comunidad del edificio y la empresa eléctrica suministradora.
Entre los denunciantes está la familia del que fuera concejal de Carballiño, Edelmiro Mateo, que no llegó a recuperarse de las lesiones que sufrió y falleció al poco tiempo; y la familia de un menor, que por entonces tenía cuatro años, y que resultó gravemente herido. Además, han denunciado dos agentes de la Policía Local de Carballiño, que también estuvieron ingresados debido a la inhalación de humo, y el propietario de un local comercial de la planta baja.
Las indemnizaciones por las supuestas responsabilidades de los daños ocasionados suman entre los siete denunciantes cerca de 400.000 euros.
Durante la sesión de hoy, que empieza alrededor de las 10,00 horas, comparecerán las partes implicadas, estando previsto que mañana lo hagan los peritos y por último, el jueves, los testigos, entre los que estarán responsables municipales en aquel momento, en que gobernaba el PP con Argimiro Marnotes como alcalde; miembros de Protección Civil y grupo de emergencias y médicos que asistieron a las víctimas, entre otros.
La Audiencia había desestimado en 2013 un recurso interpuesto contra el archivo de la denuncia hecha por dos afectados contra la intervención de los dos policías que habían resultado heridos y que ahora también son denunciantes.
El humo tóxico inundó la escalera
Siete personas habían resultado heridas graves, aunque más de 15 se vieron afectadas, de las cuales una falleció. El incendio se producía al mediodía del 12 de noviembre de 2011, en un edificio de ocho plantas, con 48 propietarios, situado en plena calle principal de Carballiño, concretamente en Tomás María Mosquera.
El fuego prendía en el cuadro de contadores ubicado en la escalera del inmueble y una vez que alertó uno de los comerciantes de las galerías Magariños, los equipos de extinción sofocaron las llamas pero no pudieron evitar el intenso humo tóxico que inundó la escalera, atrapando en ella a varias personas.
Entre los afectados, los dos policías que subieron para auxiliar a las víctimas, el niño de cuatro años con un familiar y el exedil con su mujer. Sufrieron quemaduras e intoxicación por inhalación del humo.
Los grupos de asistencia fueron rescatando poco a poco a los atrapados en la escalera, transportándolos en sillas hasta la calle, en donde fueron recogidos por varias ambulancias. Mientras, algunos de los residentes del edificio permanecieron en sus domicilios, asomados a balcones y ventanas hasta que fueron rescatados por los equipos de emergencias por lo que no sufrieron ningún daño. Vecinos de la villa también habían prestado ayuda a las víctimas.
