Los fieles de San Roque y los numerosos visitantes que durante estos días de verano acuden a Castrelo de Miño tomaron parte ayer en una procesión fluvial, con carácter único en Galicia. Al finalizar el acto religioso todos se reunieron en comidas a base de codornices a la brasa o jarrete de ternera... a fartar. Las fiestas de este fin de semana están animadas por la histórica Banda de A Lira, de Ribadavia, que cumple 167 años, toda suerte de pasacalles y orquestas para animar a los noctámbulos en las verbenas.
Devotos de San Roque y visitantes de Castrelo de Miño participaron ayer en una procesión fluvial, única en Galicia, que remató con una misa en el club náutico y la posibilidad de escoger comida a base de codornices a la brasa en el pueblo de Cortiñas, o jarrete de ternera en Macendo. El regidor local Xurxo Rodríguez Méndez, explicó ayer que la estancia de visitantes y vecinos que vuelven a Castrelo de Miño en el verano, se vio animada este año por la celebración de tres fiestas gastronómicas en torno a las procesiones de la Virgen de las Nieves, en Barral, de la Asunción, en Macendo y de San Roque, ayer en Cortiñas.
La procesión fluvial de San Roque comenzó a celebrarse hace cinco años, como indicó el patrón de embarcación José Luis Villanueva, encargado de recoger la imagen al pie de la iglesia de Santa María -en la orilla del embalsey de llevarla a través del río Miño hasta el club náutico, donde cientos de devotos esperaron su llegada.
Villanueva es vecino de Castrelo de Miño pero recordó que también él fue el encargado de transportar por el río Miño la Virgen del barrio de Portovello (Ourense) en una procesión que dejó de celebrarse hace siete años por los riesgos que entrañaba el traslado en una zona urbana y con fondos peligrosos.
Ahora sólo se celebra la procesión fluvial de San Roque, en toda Galicia, y todos los asistentes pueden elegir después si quieren comer y merendar a base de jarrete de ternera o codornices a la brasa y empanada, agregó. Las codornices a la brasa son la base del menú en Cortiñas, donde se celebra la fiesta gastronómica paralela a la procesión fluvial, mientras que el jarrete de ternera es el menú de la fiesta de la Asunción en Macendo, donde se celebrará hasta hoy la fiesta gastronómica.
Las fiestas de este fin de semana estarán animadas por la histórica Banda de A Lira, de Ribadavia, que cumple 167 años.
La procesión fluvial de San Roque comenzó a celebrarse hace cinco años, como indicó el patrón de embarcación José Luis Villanueva, encargado de recoger la imagen al pie de la iglesia de Santa María -en la orilla del embalsey de llevarla a través del río Miño hasta el club náutico, donde cientos de devotos esperaron su llegada.
Villanueva es vecino de Castrelo de Miño pero recordó que también él fue el encargado de transportar por el río Miño la Virgen del barrio de Portovello (Ourense) en una procesión que dejó de celebrarse hace siete años por los riesgos que entrañaba el traslado en una zona urbana y con fondos peligrosos.
Ahora sólo se celebra la procesión fluvial de San Roque, en toda Galicia, y todos los asistentes pueden elegir después si quieren comer y merendar a base de jarrete de ternera o codornices a la brasa y empanada, agregó. Las codornices a la brasa son la base del menú en Cortiñas, donde se celebra la fiesta gastronómica paralela a la procesión fluvial, mientras que el jarrete de ternera es el menú de la fiesta de la Asunción en Macendo, donde se celebrará hasta hoy la fiesta gastronómica.
Las fiestas de este fin de semana estarán animadas por la histórica Banda de A Lira, de Ribadavia, que cumple 167 años.
