El presidente del Consello, Lois Anxo Rodríguez, abogó por reconvertir viñedos para igualar la calidad

La Denominación de Origen Ribeiro recibe una placa al mérito alimentario de Agricultura

Lois Anxo Rodríguez (izquierda) recogió la placa de plata de manos de la ministra Espinosa.
La ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, presidió ayer la conmemoración del 75 aniversario de las Denominaciones de Origen de Vinos de España, un acto en el que los caldos de O Ribeiro fueron distinguidos con la placa de Plata al Mérito Alimentario, premio que fue recogido por su presidente, Lois Anxo Rodríguez Vázquez, quien no dudó en señalar el respaldo que esta distinción supone a la labor que las bodegas están desarrollando en los útimos años.
Ante un numeroso público que se dio cita en la tarde de ayer en la sede del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, su titular, la ourensana Elena Espinosa, aseguró que las Denominaciones de Origen de vinos de España constituyen un valioso patrimonio, ya que gozan de un prestigio reconocido. Añadiendo que su departamento siempre apoyará a este sector, continuando el proyecto que se puso en marcha en el Estatuto del Vino en 1932 con grandes dosis de ilusión, voluntad y decisión política.

En el 75 aniversario de la creación de los denominaciones y la articulación de los consellos reguladores, se contextualizó la entrega de diplomas, destacando así de manera especial a aquellos consellos que en su día fueron pioneros de un sistema de calidad que logró llevar los vinos españoles a las más altas cotas de prestigio internacional.

El presidente del Consello Regulador da Denominación de Orixe Ribeiro, Lois Anxo Rodríguez, recibió la placa de plata al mérito alimentario, mostrando su entusiasmo por el galardón, por cuanto supone de apoyo y respaldo a la labor hecha durante años.

Excelencia

En este sentido, Rodríguez Vázquez, reconoció que los vinos de O Ribeiro pueden hoy en día competir en excelencia con cualquier otro vino blanco nacional o internacional, al tratarse de caldos con frescura, sutileza y elegancia, como lo están afirmando expertos en la materia y distribuidores. No ocultó, a pesar de esto, que aún quedan bodegas que no llegan al nivel de exigencia y que por ello se está llevando a cabo una importante reconversión de la viticultura ’para que todas las hectáreas de producción estén al mismo nivel y se haga el vino de calidad que ya otras muchas hacen dentro del Consello Regulador.

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