Caride anunció que la construcción, a 27 metros sobre el río Miño, será abierta esta misma primavera

El izado de la estructura del futuro puente de Cortegada requirió hasta siete horas de trabajo

Momento en el que la estructura metálica casi alcanza la altura de los pilares.
Siete horas costó elevar la estructura metálica del puente de Cortegada para encajarlo en los pilares. La conselleira de Política Territorial asistió al complejo proceso de izado, y anunció que la nueva variante entrará en funcionamiento en dos meses.

Cuatro gatos hidráulicos con una capacidad de 200 toneladas cada uno izaron la estructura metálica central del nuevo puente sobre el río Miño, que está enmarcado dentro de la variante de Cortegada y une este Concello ourensano con el de Crecente, en Pontevedra.
La conselleira de Política Territorial, María José Caride, asistió ayer al final de este complejo proceso de ingeniería, que se iniciaba en días pasados con el montaje de la pieza de 86 metros de largo y 230 toneladas de peso en Arnoia para su traslado a través del río hasta el lugar de las obras.

Siete horas duró el izado, a una velocidad de cuatro metros por hora, y hasta alcanzar los 27 metros de altura del puente. La colocación todavía requerirá trabajos en sucesivos días para soldar la estructura a los pilares construidos en tierra firme.

María José Caride anunció que ’en dous meses esperamos que entre en servicio’, y añadió que ’esta é unha das tres pontes sobre o Miño, ademáis da de Castrelo e a da autovía de Dozón e A-52. Para mellorar a comunicación entre Ourense e Pontevedra estamos rematando este eixo que sale dende A Cañiza conecta con Cortegada, Celanova e Xinzo de Limia, esa obra estará rematada a finais do 2008’. Uno de los responsables del proyecto explicó que el pilar de la margen izquierda fue necesario construirlo en perpendicular por causa del terreno escarpado y después girarlo 90º hasta situarlo en paralelo con el río. Era la primera vez que se realizaba esta maniobra en Galicia.

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