La próxima cosecha saldrá por primera vez al mercado amparada por la Indicación Geográfica

Los pimientos de Arnoia estrenarán contraetiqueta

Una de las plantaciones de pimiento de Arnoia que se desarrollan en el concello. (Foto: MIGUEL ÁNGEL)
El Consello Regulador da Indicación Xeográfica Protexida do Pemento de Arnoia ha iniciado el proceso de inscripción de las fincas para que todos los propietarios que deseen cultivar bajo el amparo de la indicación geográfica se presenten en el Concello con el fin de cubrir la solicitud correspondiente. El presidente del Consello Regulador, Rodrigo Aparicio Santamaría, declaraba que no hay límite de plazo pero que se deben registrar las tierras para la obtención de la guía de certificación antes de la plantación de la próxima cosecha que coincide a principios del mes de mayo.
Este trámite es imprescindible, después de la constitución del Consello Regulador el pasado 8 de agosto, con el fin de crear un registro de las parcelas dedicadas a la producción del pimiento y también otro paralelo para aquellos que se dediquen a su comercialización. Para ello, en la Casa Consistorial de Arnoia han habilitado un espacio para recibir a los productores y también a los futuros comercializadores, que contarán también con ayuda del personal municipal para cubrir los impresos.

El objetivo está en que la próxima cosecha salga al mercado a finales de junio o principios de julio, dependiendo de las condiciones climatológicas, ya con el distintivo de pertenecer a la Indicación Geográfica Protegida. 'Os pementos xa non se poderán vender a granel, e posiblemente irán en bolsas dun kilo ou kilo e medio coas súas correspondentes etiquetas e contraetiquetas', indicó el presidente. Aparicio Santamaría, también señalaba que 'con esto, o cliente contará con todas as garantías de que compra pemento de Arnoia, o que suporá unha posta en valor deste producto'.

El Instituto Galego de Calidade Alimentaria se encargará de inspeccionar las características de las fincas, una vez que hayan sido registradas, comprobando los polígonos, parcelas y superficie, y también de elaborar el censo de productores y vendedores.

La producción amparada ha quedado limitada al municipio de Arnoia y a la parroquia de Meréns, en Cortegada, zonas en las que tradicionalmente se cultivaba el pimiento, y en donde se calcula que hay en torno a una veintena de productores.

Además, también funciona la cooperativa San Salvador que se encarga, entre otras funciones, de comercializar el producto, y cuya actividad se reanudó hace dos años, después de una paralización de cinco.

Rodrigo Aparicio Santamaría confía en que las condiciones climatológicas sean más favorables para la obtención de la tercera cosecha, ya que el pasado año no se superaron los 25.000 kilos, una cantidad insuficiente para abastecer el mercado.

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