La saturación de ingresos en el Servicio de Urgencias del CHOU se mantiene a pesar de la apertura de la UIT (13 plazas) y de la planta habilitada en el Santa María Nai con 23 camas.
Hasta 17 pacientes ingresados permanecían en la mañana de ayer en el área de Urgencias del CHOU (salas de observación y de espera de resultados y pasillos) a la espera de ser trasladados a las zonas de hospitalización, según Arturo González, del sindicato Cems. Además, la Unidad de Ingresos Transitorios (UIT), dotada con 13 cubículos, y las 23 camas habilitadas para ingresos en el Hospital Santa María Nai estaban al completo. Sin embargo, según Admisión, a última hora de la mañana de ayer, el servicio de Urgencias quedó liberado de camas pendientes de ubicación.
Como esta situación se mantiene desde hace más de un mes de forma intermitente, el gerente, José Luis Jiménez, aseguró que el equipo directivo del hospital, que decidió abrir el 8 de noviembre una planta en el Santa María Nai, está estudiando y valorando otras medidas para solucionar el problema, puesto que, aunque estas 23 plazas nuevas y las 13 de la UIT (que permanece abierta desde el pasado día 5) ayudan a paliar la falta de espacio, continúa la saturación de ingresos en Urgencias por falta de camas.
El jefe de Urgencias, José Antonio Carballo, hace hincapié en que este servicio, que mantiene una media estable de 250 urgencias diarias y 50 ingresos, funciona con eficacia, prestando una buena atención sanitaria y sin retrasos. No obstante, incide en que el sobreaforo del hospital es un problema que repercute en esta área, creando una situación dura para el personal y los pacientes, que cada vez degrada más el servicio.
Una situación delicada
Arturo González, que participó ayer en Sevilla en una reunión nacional con otros cien facultativos de Urgencias (también asistió Francisco Aramburu, del CHOU), en la que abordaron la la saturación de este servicio, insistió en que de cada diez pacientes ingresados, nueve entran por urgencias, porque se están utilizando para evitar las listas de espera, creándose una situación delicada. Por ello, considera que la solución pasa por la potenciación de la hospitalización a domicilio, de la unidad de corta estancia y de las consultas de alta resolución.
Como esta situación se mantiene desde hace más de un mes de forma intermitente, el gerente, José Luis Jiménez, aseguró que el equipo directivo del hospital, que decidió abrir el 8 de noviembre una planta en el Santa María Nai, está estudiando y valorando otras medidas para solucionar el problema, puesto que, aunque estas 23 plazas nuevas y las 13 de la UIT (que permanece abierta desde el pasado día 5) ayudan a paliar la falta de espacio, continúa la saturación de ingresos en Urgencias por falta de camas.
El jefe de Urgencias, José Antonio Carballo, hace hincapié en que este servicio, que mantiene una media estable de 250 urgencias diarias y 50 ingresos, funciona con eficacia, prestando una buena atención sanitaria y sin retrasos. No obstante, incide en que el sobreaforo del hospital es un problema que repercute en esta área, creando una situación dura para el personal y los pacientes, que cada vez degrada más el servicio.
Una situación delicada
Arturo González, que participó ayer en Sevilla en una reunión nacional con otros cien facultativos de Urgencias (también asistió Francisco Aramburu, del CHOU), en la que abordaron la la saturación de este servicio, insistió en que de cada diez pacientes ingresados, nueve entran por urgencias, porque se están utilizando para evitar las listas de espera, creándose una situación delicada. Por ello, considera que la solución pasa por la potenciación de la hospitalización a domicilio, de la unidad de corta estancia y de las consultas de alta resolución.
