Baltar delega un área de gobierno en cada diputado “popular'

Cada uno de los 14 diputados del grupo popular en la Diputación contará con la responsabilidad de un área específica de gobierno, bajo la supervisión del presidente, con el objetivo de 'facer unha xestión máis áxil, dinámica e cercana á cidadanía', según apuntó Manuel Baltar tras la reunión de la junta de gobierno. En el diseño del nuevo equipo se ha apostado especialmente por el empleo y el termalismo, además de los proyectos estratégicos para la provincia.
Las funciones de 'creación de emprego e relacións empresariais e sindicais' las asumirá Plácido Álvarez, también portavoz del grupo y alcalde de Muiños, las de 'aproveitamento de recursos, promoción do termalismo e establecementos termais' serán responsabilidad del alcalde de O Carballiño, Argimiro Marnotes, mientras que el desarrollo de planes estratégicos -agroalimentación, pizarra y textil, entre otros- se incluye dentro del área asignada a Antonio Montero, alcalde de Avión.

El vicepresidente Rosendo Fernández tendrá también un peso determinante en la configuración de las líneas de gobierno, ya que se encargará de la gestión presupuestaria, incluida dentro del área de economía. El área de Industria ha sido asignada a José Manuel Freire, presidente ya del Instituto Ourensano de Promoción Económica (Inorde), dependiente de la Diputación, y alcalde de Barbadás, que se coordinará codo con codo con Antonio Pérez -alcalde de Xinzo de Limia-, quien estará al frente de 'investimentos, rede viaria e grandes proxectos'.

El resto de áreas distribuidas entre el equipo de gobierno fueron medio ambiente, en manos de Francisco Rodríguez -alcalde de Chandrexa de Queixa-; turismo, José Antonio Feijóo (Baltar); cultura, Antonio Mouriño (Celanova); educación y universidad, Avelino García (A Rúa); agricultura, Emilio José Pazos (Trasmiras); deportes, Luciano Cuquejo (Cualedro); servicios sociales, Eladio Mangana (Baños de Molgas) y personal, en manos de Eliseo Fernández (Pereiro de Aguiar).

El presidente Manuel Baltar definió esta asignación de cometidos específicos a los diputados populares como 'un instrumento máis potente de dinamización da provincia', que responde a los 'intereses de Ourense cunha planificación estratéxica'.

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