La sentencia impone la correspondiente indemnización a la víctima por las lesiones y las secuelas producidas
Javier P.M. aceptó ayer una pena de un año y nueve meses de prisión por un delito de lesiones, tras el acuerdo alcanzado entre el letrado de la defensa y la fiscal. Esta última, en su escrito de calificación provisional, reclamaba inicialmente tres años de cárcel.
El inculpado reconoció en el Juzgado de lo Penal 1 que 9 de abril del pasado año, sobre las 02,30 horas, se acercó a un hombre que se encontraba conversando con un tercero en un bar de la avenida de Zamora. Sin causa que lo justifique, le propinó un golpe a la altura de la oreja izquierda con una botella de cerveza, provocándole heridas incisas en la zona auricular y temporal izquierdos que requirieron sutura, medicación antiinflamatoria y antibiótica. La agresión le dejó como secuelas tres pequeñas cicatrices, la más visible, de dos centímetros, bajo la patilla izquierda.
Secuelas
La misma sentencia le impone la correspondiente indemnización a la víctima por las lesiones y las secuelas, así como al Sergas por los gastos que originó la atención a la víctima.
En un principio, la fiscal reclamaba tres años de prisión, en aplicación de una agravante de reincidencia, así como la prohibición de aproximarse a menos de 300 metros a la victima, su domicilio y lugar de trabajo por un periodo de cuatro años.
