Aquella medianoche del 24 de octubre de 2008, José Marcos Montouto, de 27 años, accedió en el garaje del número 21 de la calle Mayor de Verín y, una vez dentro, actuó como un torbellino, arrasando cuanto vehículo se le ponía delante.
Juzgado por un delito de robo continuado con fuerza en las cosas, el acusado reconoció los hechos. Ello le valió una rebaja en la pena, que finalmente será de ocho meses de prisión. La indemnización a la que hará frente como consecuencia de los desperfectos causados en los coches ascienden a 2.117 euros.
El acusado comenzó la faena con un Renault Express, a la que fracturó las ventanillas delanteras y traseras; pasó a un Audi A4 y un Seat Ibiza; saltó a un Toyota Corolla, al que rompió la ventanilla de la puerta trasera; continuó con un Mitsubishi Montero y un Volkswagen Golf, antes de desembocar en un Peugeot 206 y seguidamente en un Citroën C-5. En todos ellos, revolvió el interior pero no llevó nada. Fue al dar en un Hyundai Terracan cuando comenzó a sustraer algunos elementos, como una bolsa de recetas médicas, un fonendoscopio y una calculadora. Regresó a la letanía de romper y revolver, pero sin hurtar, en un Renault Scenic, un Seat Córdoba, un Peugeot 207 y un Peugeot Partner. El acusado fue detenido en el mismo garaje.
El acusado comenzó la faena con un Renault Express, a la que fracturó las ventanillas delanteras y traseras; pasó a un Audi A4 y un Seat Ibiza; saltó a un Toyota Corolla, al que rompió la ventanilla de la puerta trasera; continuó con un Mitsubishi Montero y un Volkswagen Golf, antes de desembocar en un Peugeot 206 y seguidamente en un Citroën C-5. En todos ellos, revolvió el interior pero no llevó nada. Fue al dar en un Hyundai Terracan cuando comenzó a sustraer algunos elementos, como una bolsa de recetas médicas, un fonendoscopio y una calculadora. Regresó a la letanía de romper y revolver, pero sin hurtar, en un Renault Scenic, un Seat Córdoba, un Peugeot 207 y un Peugeot Partner. El acusado fue detenido en el mismo garaje.
