San Amaro, Bande o Allariz, víctimas de los problemas, que no han permitido oficializar la Diputación
Diferentes problemas técnicos en el volcado de los datos de las votaciones de las elecciones del pasado domingo al portal oficial del Ministerio del Interior han generado una importante confusión en varios concellos de la provincia, un escenario que se ha vivido también en diferentes puntos de España, que dos días después seguían sin conocer los resultados del 26-M –repartiéndose la culpas entre problemas a nivel local y, en otros, apuntando a la empresa Scytl, encargada del recuento tras ganarle el concurso a Indra–.
Esta confusión ha afectado a plazas importantes en Ourense, ya que no se ha librado la propia ciudad, donde hasta este martes a la tarde solo se podía conocer el escrutinio al 99,14%, ya que problemas en una mesa situada en las dependencias de la Consellería de Sanidade, en la que se levantó una incidencia, impidió su volcado el mismo domingo.
Los problemas en la ciudad han supuesto también que los diferentes partidos no hayan podido dar por definitivo el reparto de escaños en la Diputación, una institución en la que los representantes se eligen en función de los votos en los siete partidos judiciales en los que está dividida la provincia.
Es precisamente en el de Ourense donde está bailando el escaño que otorgaría al PP el diputado que le valdría la mayoría absoluta, que en un principio será adjudicado al PSOE, formación en la que, según fuentes de la misma, están convencidos de que no se alterará el resultado. Sin embargo, desde el PP recuerdan que hay varias reclamaciones presentadas en mesas del partido judicial y que será la junta electoral la que hoy, cuando está previsto celebrar el escrutinio definitivo que permitirá oficializar el resultado, decida sobre el resultado de todos los colegios electorales. La cita está prevista para esta mañana, a partir de las 09,30 horas en el edificio judicial. Desde Ciudadanos intentarán también arañar un tercer edil en la ciudad a costa del PSOE, que lo ve prácticamente imposible.
Casos
La confusión con el escrutinio saltó ya en pleno domingo, cuando los datos de Allariz ofrecían con el 100% del voto examinado un hecho histórico, la pérdida de la mayoría absoluta del BNG en Allariz, que veía como empataba a seis escaños con el PP, resultado que no se correspondía con la realidad y que, minutos después, se convertía en nueve escaños para los nacionalistas.
Más ha durado la incertidumbre en San Amaro, donde los resultados ofrecidos en el portal del Ministerio del Interior cambiaron tanto el número de votos obtenidos por los partidos como el reparto de escaños, lo que cambiaba totalmente la gobernabilidad, al situar a Xuntos por San Amaro por delante del PSOE, cuando en realidad son los socialistas los que obtuvieron tres concejales, quedándose la otra formación con dos, por los cuatro del Partido Popular.
Tampoco se acertó en la divulgación de los datos de Bande, que arrojaban hasta este martes cinco escaños para el PP y cuatro para el PSOE, cuando en realidad la diferencia fue de seis a tres. El propio alcalde de la villa, José Antonio Armada, apuntaba que el error se debió a un fallo del técnico de la administración, que no computó bien los votos de una de las mesas.
El Concello de Trives completa el desaguisado, ya que a día de hoy es imposible cotejar el escrutinio definitivo, solo avanzado al 81% del total.
Caos en Xinzo por la candidatura que fue incluida tras una reclamación
Uno de los focos de atención del 26 de mayo por el escenario abierto que se aventuraba estaba en Xinzo, donde tras un mandato convulso la lista de alternativas creció hasta ocho partidos, aunque con suspense incluido, ya que la formación Xunt@s por Xinzo consiguió ser proclamada después de ganar un recurso, ya que en un primer momento fue excluida al estar conformada únicamente por mujeres, algo que la norma sobre paridad prohíbe y que obligó al partido a incluir a hombres en la misma.
Según confirmaron fuentes de la Delegación del Gobierno en Galicia, los diferentes dispositivos móviles y la aplicación habilitada para que los técnicos de la administración volcasen los datos de cada una de las mesas sufrió un colapso al no estar habilitada una casilla para ese partido, lo que impidió que se pudiese comprobar el reparto de fuerzas en la villa antelana hasta ayer a las 17,00 horas, cuando se actualizaban los datos.
Nervios
Durante la noche electoral, con la tensión a flor de piel, los partidos tuvieron que acudir a sus representantes en las diferentes mesas para hacer el recuento, que estableció finalmente una caída del PP que le priva de la mayoría absoluta.
Todos estos problemas han impedido que el escrutinio en la provincia esté completo. Según recoge el portal del Ministerio del Interior, está completo al 99,59%.
