La nieve podría volver a la ciudad de Ourense esta semana, cuando bajará la cota de nieve a en torno de los 300 metros con la llegada de la borrasca Fien. No sería la primera vez. En alguna ocasión la ciudad fue cubierta por un manto blanco que dejó bonitas estampas. ¿Cuándo fue la última vez que cayó nieve en la ciudad?
2018
Aunque en 2018 hubo un pequeño amago, finalmente la nieve se resistió a quedarse en la ciudad al no cuajar.
2009
Hace catocer años que los ourensanos no ven la ciudad cubierta de blanco. Fue en enero de 2009 y, tras cuatro temporales en ese invierno, la nieve por fin llegó a la capital de la provincia. Como en ocasiones anteriores, lo vecinos no dudaron en aprovechar esta oportunidad única y salir a la calle a disfrutar del blanco manto, a fotografiar la ciudad nevada y como no, a hacer muñecos de nieve. Además, la nevada también ocasionó varios incidentes y accidentes de tráfico.
Accidente en A Carballeira. Foto: EFE
2006
El 28 de enero de 2006 la nieve visitó la ciudad, en esta ocasión durante varios días. Los copos tiñeron de blanco céntricas calles como la rúa Paseo, la Praza Maior, el campo de O Couto o el paseo Barbaña, dejando estampas como las siguientes:
FOTOS: Daniel Atanes
FOTOS: Daniel Atanes
FOTOS: Daniel Atanes
FOTOS: Daniel Atanes
FOTOS: Daniel Atanes
FOTOS: Daniel Atanes
2003
Tres años antes, en enero de 2003, Ourense vivió la primera nevada del siglo XXI. El frío de los primeros días del año llegó en compañía de los copos, que recorrieron las céntricas calles de la ciudad como la rúa do Paseo y Progreso y el Parque de San Lázaro, sorprendiendo a la población.
Foto: Aurora Des
1987
En 1987, Ourense también amaneció cubierta de blanco. En esta ocasión, se trató de una intensa nevada que además de la ilusión, ocasionó numerosas incidencias en las carreteras de toda la provincia y dejó incomunicados a varios pueblos.
1970
En la década de los 70, los ourensanos ya había disfrutado de la nieve en el centro de Ourense. Los copos cuajaron, llegando a formar un blanco manto de nieve que fue aumento hasta alcanzar un espesor que, en algunos lugares, llegó a los veinte centímetros, y en las afueras a más de treinta.
Fotos: Reza
La Plaza Mayor, con su árbol de Navidad, cubiertas sus ramas del blanco elemento, ofrecía este inusual aspecto sobre las cuatro de la tarde, al igual que la de Bispo Cesáreo, o la Alameda, en donde los más jóvenes la emprendieron a batallas de bolas de nieve, o a levantar un enorme muñeco.
Fotos: Reza
1963
Nuestro recorrido finaliza en el 2 de febrero de 1963, cuando la ciudad quedó bajo los efectos de una fuerte nevada.