Cuidar como forma de vida

Los aplausos resonaron entre las paredes del edificio de hospitalización del CHUO en honor a la Enfermería, pero también al resto de personal sanitario, a voluntarios y miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado que luchan contra la pandemia. Un minuto de silencio, cargado de emoción, sirvió para recordar a las víctimas del covid-19. 

Bajo el lema “Enfermería: Una voz para liderar - Una visión de futuro para la atención de salud”, estos profesionales se preparan los tiempos que vienen después de un año en el que su desempeño alcanzó “outra dimensión” y que ha servido de “punto de inflexión” en su aprendizaje. “Nun presente de incertenzas, soupemos ser unha lámpada na escuridade”, apuntaron. 

Personal administrativo, de cocina, de la cafetería, de admisión, los facultativos, los trabajadores de logística, de limpieza, de trabajo social, de informática, el 061, el área de Saúde Mental, de Radiología, de Matronería, de Pediatría, de Atención Primaria, de Telea, de Preventiva, de Urgencias, de UCI, de Hospitalización, los técnicos de esterilización, los celadores, el laboratorio, los fisioterapeutas, servicios nuevos como el Covid-Auto y los equipos de vacunación, Protección Civil, Cruz Roja y la Policía Local están representados en un mural con imágenes. La escultura “Lux Áurea”, “guía no noso traballo” y los pacientes, que dan sentido a su labor, culminan este homenaje. 

Ángeles Puga, quien estuvo ingresada en la UCI al inicio de la pandemia por el covid, representó a todos lo pacientes que cada día atienden estos profesionales. “Gracias polo ben que nos coidades e por estar pendentes de nós”, agradeció a los presentes con una emoción que no la permitió continuar: “Non teño palabras”. Los aplausos regresaron en su honor, pero también el de los que luchan cada día contra la enfermedad. 

Lourdes Bermejo, enfermera de la unidad de críticos que estuvo con ella durante el proceso, le entregó un ramo de flores como obsequio en nombre de la Enfermería. “Eres la persona que representa a todos los pacientes que pasaron por aquí. Te vemos como un ejemplo del que hemos aprendido mucho, porque no solo ofrecimos nuestros cuidados, también nos enseñaste a querer vivir”, reconoció emocionada.

Beatriz Cabanelas, directora de Enfermería del área sanitaria, tuvo también unas palabras de agradecimiento para sus compañeras, en un año de pandemia que “nos obligó a tomar las riendas desde la sanidad pública, dando el 200%”. La profesión se reivindicó y en este día no quiso olvidarse del pasado: “Honramos el legado de las que nos precedieron en más de cien años”, aseguró. Creando servicios que antes no existían, adaptándose constantemente, siguen luchando desde la primera línea. “Esta guerra nos ha visibilizado, mostrando nuestro valor dentro de la sociedad. Estoy muy orgullosa de llevar esta responsabilidad, pero también de ser enfermera”, destacó Cabanelas. 

El mensaje del cómico ourensano Moncho Borrajo fue una de las sorpresas del día, que contó con dos compañeros de Músicoterapia amenizando el acto.