El entierro tendrá lugar el lunes, día 31, en Carballiño, donde también reposan los restos de su hijo, Xaime Quesada Blanco, fallecido en el 2006.
Pintor, escultor, y últimamente como él solía definirse sobre todo, escritor, marcó un estilo único y propio en el arte, no ya ourensano, sino universal. Artista comprometido políticamente en la época de la dictadura, sus cuadros han sido expuestos en los museos y galerías más importantes del mundo, siendo la última en Estrasburgo, en el Parlamento Europeo, bajo el título Los derechos humanos. Testimonios.
Una de las últimas ocasiones de poder ver su obra en Ourense, fue hace algo más de un año, en Caixanova, en una exposición conjunta con su hijo, ya fallecido. En cuanto a su faceta de escritor, Cuentos Crueles fue su último libro publicado, donde mostró su lado más crítico.
El Pazo de Vilamarín alberga una exposición permanente de su obra y en la ciudad son varias las esculturas que llevan su firma, una de las más conocidas la situada al lado de los jardines del Padre Feijóo.
El mundo del arte ha perdido, sin duda, a uno de sus más importantes exponentes. La inmortalidad, de la que le gustaba presumir, decidió finalmente abandonarlo.
Una de las últimas ocasiones de poder ver su obra en Ourense, fue hace algo más de un año, en Caixanova, en una exposición conjunta con su hijo, ya fallecido. En cuanto a su faceta de escritor, Cuentos Crueles fue su último libro publicado, donde mostró su lado más crítico.
El Pazo de Vilamarín alberga una exposición permanente de su obra y en la ciudad son varias las esculturas que llevan su firma, una de las más conocidas la situada al lado de los jardines del Padre Feijóo.
El mundo del arte ha perdido, sin duda, a uno de sus más importantes exponentes. La inmortalidad, de la que le gustaba presumir, decidió finalmente abandonarlo.
