La inflación mantiene su tendencia alcista y alcanzó en la provincia un nuevo máximo desde que hay registros. Los precios aumentaron, de media, un 11,3% interanual en junio, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, por el efecto del encarecimiento de los combustibles y la energía, que se ubicó en el 49%.
Entre los elementos que más subieron de precio, además de los componentes energéticos, están los de utilización de vehículos personales, como piezas y repuestos (23,8%), los servicios de alojamiento (20,3%) y los alimentos (13,9%).
El dato ourensano vuelve a superar la media nacional, que fue del 10,2%, y coloca a la provincia entre las 14 con una mayor inflación. A nivel gallego, Pontevedra (11,7%) y Lugo (11,6%) registran la mayor subida de precios. Por su parte, A Coruña, la de menor aumento, se quedó en el 10,4%.
La decana del Colegio de Economistas de Ourense, Carmen Sampayo, señala que “o dato é preocupante porque estamos asistindo a un incremento do núcleo da inflación ou inflación subxacente”, aquella que excluye los componentes energéticos y los productos sin elaborar, que suelen tener un comportamiento más volátil. “Esto significa que as empresas están trasladando aos consumidores, vía prezos, o maior custe que lle supón producir”, agrega.
Sampayo destaca que “aínda que a perda de poder adquisitivo é para toda a poboación sen excepción, son as familias con menos recursos as máis afectadas, xa que non poden facer fronte a este encarecemento, polo que deixarán de consumir determinados produtos”.
También advierte que “esta espiral inflacionista pódese ver incrementada no caso de que aumenten os salarios e as pensións na mesma proporción que a inflación e non desliguemos ditas subas da mesma”. El Gobierno se comprometió meses atrás a subir las pensiones conforme al IPC, mientras que en lo que respecta a los salarios, los convenios colectivos firmados en la provincia hasta la fecha incluyen un alza salarial media del 2,4%. La decana de los economistas subraya la importancia de alcanzar un pacto de rentas, ya que el no hacerlo “tería consecuencias económicas como a perda de competitividade e a desaceleración da actividade económica”.
El IPC nacional sube al 10,2% y el gallego registra un aumento del 11,1%
El Índice de Precios de Consumo (IPC) nacional subió un 1,9% en junio en relación al mes anterior y disparó su tasa interanual 1,5 puntos, hasta el 10,2%, su nivel más alto desde abril de 1985, según los datos definitivos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La escalada de la inflación en junio se debe, principalmente, a las subidas de los precios de los carburantes, de los combustibles para calefacción, de la electricidad, de la restauración y los hoteles, y de los alimentos.
A nivel gallego, el aumento fue del 11,1% en comparación con el mismo mes de 2021. La tasa interanual del IPC en Galicia es la tercera mayor entre comunidades, solo superada por Castilla-La Mancha (12,7%) y Castilla y León (11,6%).
Por grupos, el que más crece es la vivienda -incluye electricidad y combustibles- (23,8%), seguida por transporte (19,5%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (12,6%).