Aunque a partir del martes las temperaturas podrían superar de nuevo los 20 grados
El verano anticipado que vivió particularmente la provincia de Ourense la pasada semana dio paso al frío con la llegada de una masa de aire frío procedente del Atlántico norte que provocó que las temperaturas se desplomaran en la jornada de ayer, pasando de los 30 grados del viernes a los 16 de máxima del domingo en la ciudad (la mínima fue de 8 grados).
Además, según explican desde Meteogalicia, el descenso notable de las temperaturas se acompañó de una sensación térmica de frío debido a que los vientos soplaron moderados del noroeste. En este penúltimo domingo antes de la llegada de la primavera, la cota de nieve en Galicia fue bajando conforme avanzó el día hasta situarse sobre los 900 metros en las zonas de montaña de Ourense y Lugo.
La situación a partir de ahora será cambiante, algo muy propio de la primavera, según dicen los expertos. De hecho, el frío no abandonará la provincia en el día de hoy (con máximas de 16 pero mínimas de tres grados) pero sí mejorará a partir del martes, con previsiones que superarán los 20 grados. El anticiclón se situará al norte de la comunidad lo que dará estabilidad, con días con poca nubosidad.
