Juzgado por una agresión en una farmacia para lograr sedantes

Juan Carlos F.G., de 42 años, se sentó ayer en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal 1 por entrar en dos farmacias de la ciudad en 2009 y atemorizar en una al dependiente para conseguir ansiolíticos y, en la otra, propinar un puñetazo al farmacéutico con el mismo fin.
Los hechos que le atribuye el fiscal ocurrieron el 22 de abril de ese año. Entonces, alrededor de las tres de la tarde, entró en una botica emplazada en el número cuatro de la avenida de Buenos Aires con un informe médico manipulado en el que se le recetaba Trankimazin y Rohypnol. El acusado, ante la negativa del dependiente a suministrarle los fármacos, le espetó: 'O me lo das o te voy a apuñalar', huyendo al percatarse de que varios clientes presentes avisaban a los agentes.

Al poco, asimismo, se dirigió a otra farmacia, ubicada en Progreso. En esta última, volviendo a mostrar el informe manipulado, se topó, de nuevo, con la negativa de su responsable para darle los medicamentos. En este caso, le dio un puñetazo, al tiempo que lo amenazó de muerte.

El fiscal, que pedía inicialmente cuatro años de cárcel para él (dos por cada uno de los dos delitos de robo que le atribuyó), rebajó su petición de pena a dos meses de prisión por cada delito (interesó que se sustituyan por días de trabajos). Entiende que es adicto a la droga desde 2003 y que realizó los hechos 'para lograr fármacos para aliviar un incipiente síndrome de abstinencia'.

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