Los restos mortales del ejecutivo ourensano descansan en el panteón familiar del cementerio de San Verísimo

Multitudinario funeral en Celanova por Manuel Rodríguez de la Fuente

Amigos y familiares llevan el féretro al templo.
Centenares de personas despidieron ayer en Celanova al empresario ourensano Manuel Rodríguez de la Fuente, que falleció el pasado martes víctima de un fatal accidente de tráfico. La iglesia parroquial de San Salvador enmudeció en la triste despedida de un hombre 'creativo, emprendedor, que supo compaginar su vida personal con su labor profesional', según recordaba el párroco celanovés, Césareo Iglesias, quien alabó las virtudes de un joven comprometido que durante años, y a pesar de sus muchas responsabilidades, dirigió el grupo folklórico del municipio.
Minutos antes de las siete de la tarde, hora a la que comenzaba el funeral por su eterno descanso, ya eran muchas las personas congregadas en el templo parroquial a la espera del féretro, trasladado desde la capitlla ardiente del tanatorio de As Burgas.

Entre los asistentes, numerosos políticos y empresarios, pero sobre todo amigos y familiares del fallecido, que dejaron muestras de su honda tristeza. No faltaron, pues, personajes como el secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, o el presidente provincial del PP, José Manuel Baltar, así como la cúpula empresarial de la provincia y numerosos alcaldes de todos los colores políticos. 'Es una perdida irreparable', señalaban unos y otros a la salida de un sepelio presidido por una decena de curas de toda la diócesis.

A hombros y en un silencio conmovedor, su féretro presidió el cortejo fúnebre que, después del funeral, recorrió a pie los poco más de 1.200 metros que separan el templo rosendiano del cementerio parroquial de San Verísimo, en cuyo panteón familar del camposanto de la localidad descansan ya sus restos mortales.

Te puede interesar