El nuevo ministro de Transportes, Óscar Puente, afronta una legislatura crucial para la provincia de Ourense
El nuevo ministro de Transportes, Óscar Puente, llega a su cartera con un escenario ferroviario muy complejo. Con la transferencia de las cercanías a Cataluña, de momento ha conseguido desconvocar una huelga planteada por los sindicatos de Renfe y Adif que arrancaba hoy. A esto se suma una larga lista de infraestructuras y asuntos por resolver, como la necesidad de nuevos trenes y más personal como principales asignaturas pendientes. En lo que a Galicia concierne, los problemas en los servicios de media distancia han acentuado unas carencias que se suman a las obras pendientes para finalizar la línea de alta velocidad, entre las que destacan las que afectan a la provincia de Ourense: la variante exterior y la intermodal. Pero también el desdoblamiento de la vía única entre Pedralba y Taboadela, la salida sur de la estación de Vigo y la variante de Cerdedo que lleve la línea de alta velocidad hasta la ciudad olívica.
En lo que concierne a la capital de la provincia la alta velocidad todavía no ha resuelto los dos problemas capitales para su desarrollo urbano: los últimos nueve kilómetros de variante exterior, cuya inversión necesaria superará los 350 millones de euros, y sobre cuyo futuro todavía hay una gran incertidumbre que su predecesora no fue capaz de resolver. El segundo y no menos importante es la intermodal, con un presupuesto que se acercará a los 140 millones. En total son casi quinientos millones de euros que no contarán con el auxilio de los fondos Next Generation, ni de la premura que estos exigen para el cumplimiento de los plazos de ejecución.
Además de esas dos infraestructuras capitales en la línea de alta velocidad, desde el Ministerio se tienen que resolver otros problemas relacionados con el servicio ferroviario, como es determinar la dotación de trenes Avril con los que se pondrá fin al déficit de plazas en las comunicaciones con la capital de España, que se hacen más patentes en períodos punta como las navidades, la restitución de las cuatro frecuencias de obligación de servicio público pendientes de recuperar en el corredor Ourense-Vigo, y disponer de trenes y personal suficientes para poner fin a las reiteradas incidencias que causan retrasos, supresiones de ferrocarriles y el uso alternativo de autobuses que en los últimos días se han acentuado.
El relevo en Adif y Renfe puede dar pistas
El primer indicador que marcará hacia dónde irá la política del nuevo ministro en materia de infraestructuras ferroviarias lo desvelarán los nombramientos que realice en los puestos clave para esta materia: el Secretario de Estado de Transportes, número 2 del ministerio, el secretario general de infraestructuras y los presidentes o presidentas de Renfe y Adif. Si bien es en el Consejo de Ministros donde se toman las decisiones políticas, en estos puestos de segunda y tercera línea es donde se establecen los planes que marcan los calendarios de ejecución, como se ha demostrado con anterioridad. En esos puestos Galicia ha contado con valedores como Isabel Pardo de Vera (Lugo, 1975), primero presidenta de Adif con José Luis Ábalos y luego Secretaria de Estado de dicho ministerio, o Sergio Vázquez Torrón, quien había nacido el mismo año y en la misma ciudad que Pardo de Vera, como Secretario General de Infraestructuras. Aún así no lograron asegurar las obras pendientes.
“Es intolerable”, dice Rueda acerca de una respuesta de Puente sobre el AVE gallego
La primera intervención pública del nuevo ministro de Transportes se produjo en el programa “La noche en 24 horas”, del canal 24 horas de RTVE que dirige el periodista pontevedrés Xabier Fortes. En el curso de la entrevista, en el programa del miércoles, el periodista le preguntó por la variante del AVE a Vigo. “Tenemos dos gallegos de Vigo en la redacción, me preguntan para cuándo el AVE a Vigo, y ya que pase por Pontevedra, mejor”, a lo que contestó “la carta a los Reyes Magos, en todos los lugares”, haciendo referencia a las demandas de muchos territorios y señalando que le había llamado el alcalde de Vigo el día anterior, seguramente para hablar de ese tema. Luego se escapó de dar respuesta hablando de la futura variante de Olmedo, que va a ser transcendente, según sus propias palabras, para evitar que la línea gallega de alta velocidad siga siendo exclusivamente radial y tenga comunicación con la línea que pasa por Valladolid hacia el norte. Dicha declaración no sentó bien en la Xunta, pues fue objeto de réplica por parte del presidente, Alfonso Rueda, en la rueda de prensa posterior al Consello, quien consideró “intolerable” que Óscar Puente se refiriese a la llegada del AVE a las ciudades de Pontevedra y Vigo como una carta a los reyes magos.
“Se acaba de marchar un equipo ministerial inédito absolutamente a muchos efectos para Galicia y ahora se incorpora un nuevo equipo que espero que arregle los muchos problemas que hay”, dijo Rueda quien añadió que “escuchar al nuevo responsable del ministerio no da ningún ánimo ni ninguna perspectiva de mejora”, y recordó los graves retrasos de los trenes.
