El Concello de Ourense se adentra en el primer trimestre del año sin haber aprobado, ni siquiera inicialmente, sus presupuestos municipales de 2013, a pesar de que formalmente deberían estar en vigor desde enero.
El concejal de Economía, el socialista José Ángel Vázquez Barquero, aseguraba ayer que presentará el borrador 'un día de estos' y que la estrategia será la de presentar el borrador de las cuentas, similares a las de 2012 -por lo que podrían rondar los 100 millones de euros-, a los tres grupos de la oposición para negociar un acuerdo, que necesita al estar gobernando en minoría. Es decir, no habrá negociaciones previas con ningún grupo municipal de cara a asegurarse su apoyo en la votación plenaria.
'Presentaremos el borrador como gobierno municipal y después los grupos podrán presentar sus enmiendas', explicaba el edil. Es de suponer que será a partir de ese momento cuando el grupo de gobierno se plantee qué propuestas de la oposición incorpora para lograr la mayoría absoluta de la Corporación, pues necesita el voto de tres concejales.
También el BNG, que podría considerarse el apoyo natural que buscaría el gobierno, dejó claro que 'seguiremos o trámite normal de enmendas', asegura su portavoz, Xosé Somoza, que añade que 'o BNG xa deixou claro que para apoiar os orzamentos, estes terán que afrontar especialmente o problema do desemprego e impulsar os servizos sociais, polo que deben ter un maior peso concellerías como Benestar Social, Participación Cidadá, Mocidade ou Igualdade'. Los nacionalistas también pusieron como condiciones para su apoyo que los presupuestos apoyen la cultura y lengua gallegas.
Por su parte, Beatriz Tejada, concejala del PP, critica el retraso de las previsiones económicas de la institución municipal, asegurando que 'el concejal nos dijo en junta de área que presentaría el borrador a finales de febrero y estamos ya en marzo y no lo tenemos'.
A su juicio, las cuentas 'mantendrán una estructura parecida a las del año pasado, con un importante peso de personal y gastos corrientes y poco en materia de inversiones'.
Y es que, aunque no se dan detalles de cómo serán estos presupuestos, los concejales del grupo de gobierno ya han dejado caer en diversas reuniones con la oposición que habrá recortes en buena parte de las áreas municipales, seguramente debido a la situación de crisis económica que disminuye los ingresos de la entidad municipal mientras, por otro lado, se produce un incremento en el coste de los servicios.
Ya el año pasado, todavía en coalición con el BNG, los presupuestos municipales se centraron básicamente en mantener servicios considerados prioritarios, como es el caso de la ayuda a domicilio, y en hacer frente a los gastos del Concello, dejando muy poco espacio a las inversiones, que ascendían a 4,7 de los 100,2 millones del total.
'Presentaremos el borrador como gobierno municipal y después los grupos podrán presentar sus enmiendas', explicaba el edil. Es de suponer que será a partir de ese momento cuando el grupo de gobierno se plantee qué propuestas de la oposición incorpora para lograr la mayoría absoluta de la Corporación, pues necesita el voto de tres concejales.
También el BNG, que podría considerarse el apoyo natural que buscaría el gobierno, dejó claro que 'seguiremos o trámite normal de enmendas', asegura su portavoz, Xosé Somoza, que añade que 'o BNG xa deixou claro que para apoiar os orzamentos, estes terán que afrontar especialmente o problema do desemprego e impulsar os servizos sociais, polo que deben ter un maior peso concellerías como Benestar Social, Participación Cidadá, Mocidade ou Igualdade'. Los nacionalistas también pusieron como condiciones para su apoyo que los presupuestos apoyen la cultura y lengua gallegas.
Por su parte, Beatriz Tejada, concejala del PP, critica el retraso de las previsiones económicas de la institución municipal, asegurando que 'el concejal nos dijo en junta de área que presentaría el borrador a finales de febrero y estamos ya en marzo y no lo tenemos'.
A su juicio, las cuentas 'mantendrán una estructura parecida a las del año pasado, con un importante peso de personal y gastos corrientes y poco en materia de inversiones'.
Y es que, aunque no se dan detalles de cómo serán estos presupuestos, los concejales del grupo de gobierno ya han dejado caer en diversas reuniones con la oposición que habrá recortes en buena parte de las áreas municipales, seguramente debido a la situación de crisis económica que disminuye los ingresos de la entidad municipal mientras, por otro lado, se produce un incremento en el coste de los servicios.
Ya el año pasado, todavía en coalición con el BNG, los presupuestos municipales se centraron básicamente en mantener servicios considerados prioritarios, como es el caso de la ayuda a domicilio, y en hacer frente a los gastos del Concello, dejando muy poco espacio a las inversiones, que ascendían a 4,7 de los 100,2 millones del total.
