Miembros de la Plataforma Sos Sanidade Pública, acompañados de personal sanitario y de los líderes políticos de la oposición, pidieron a las puertas del Complexo Hospitalario de Ourense un compromiso claro y veraz del Gobierno gallego del PP para el Plan Director del CHUO al tiempo que expresaban su rechazo a la política de recortes del Ejecutivo que dirige Alberto Núñez Feijóo.
Se repetía la imagen del mes de mayo ante las obras del nuevo Hospital de Vigo, prácticamente paralizado por la incapacidad de las empresas constructoras con objeto de obtener la financiación para continuarlo, una estrategia de protesta que obtuvo una gran repercusión.
Ayer, con la misma puesta en escena y a la entrada de los dominios de la gerente de gestión integrada de las infraestructuras sanitarias, la 'popular' Eloína Núñez, una pancarta sujetada por profesionales del sector y por políticos defendía el derecho de los ciudadanos a la sanidad pública. A la cabeza del plantel político, figuraron el secretario xeral del PSdeG, Pachi Vázquez; el portavoz nacional del BNG, Xavier Vence -ambos, por cierto, haciendo gala de su buen entendimiento en materia de reivindicaciones-; el responsable en Ourense de Compromiso por Galicia, Pérez Bouza; o el parlamentario de AGE, David Fernández Calviño.
Tras la lectura de un manifiesto, por parte de Luis Alvarez, miembro de la Plataforma, el socialista criticó la paralización 'evitable' de la inversión en sanidad por parte de la Xunta pues hay 200 millones de euros del año 2012 sin invertir 'que es dinero público que hay que destinar a la sanidad pública' y que demuestra que la 'paralización de la inversión es evitable' y no una cuestión económica, 'sino ideológica'.
Por su parte, Vence aludió a la 'irresponsabilidad' del presidente Feijóo por 'dejar pasar por delante de la puerta' fondos europeos que ahora corre el riesgo de perder y por quedar paralizada la inversión en el Complexo tras quedar desierto un concurso público para la gestión integral de espacios, que se vincula y, sobre todo, condiciona la construcción del nuevo edificio de hospitalización que, además, es imprescindible para que después se puedan ejecutar los millonarios fondos Feder destinados a innovación y tecnología.
LAS CRÍTICAS
Pachi Vázquez apeló al sector profesional sanitario ante el 'riesgo real de perder la financiación europea' por este modelo de financiación empleado por el Sergas, con el que se impone a una empresa, la que debe gestionar al final los servicios no sanitarios -limpieza, energía y mantenimiento- el pago previo de 14 millones de euros para construir el edificio de hospitalización; y como es dinero no es suficiente, la Administración se reserva después la decisión de continuarlo, en función de la disponibilidad presupuestaria.
Vázquez se refirió también al colectivo de 360 sanitarios de Vigo -allí el nuevo Hospital, con financiación privada, tiene múltiples problemas para llevarse a término-, que dieron a conocer los datos de las listas de espera 'para evidenciar que donde se dice que hay 6.000 personas pendientes de cita, en realidad hay 20.000 pacientes'.
Igualmente, Vence consideró fracasado el intento de la Xunta de buscar financiación privada, lo que deja claro, dijo, que la única posibilidad es que el sector público se comprometa a dotar de material y recursos a la sanidad y en este momento ya hay servicios claramente infradotados por irresponsabilidad de la Xunta.
Luis Alvarez dijo esperar, por tanto, respuestas de la Administración autonómica 'porque la ciudadanía de Ourense ya no quiere más maquetas, ni inauguración de planes, sino respuestas, y tampoco vale que los fondos aprobados por la UE se vayan a otro lugar'.
'Exigimos un pronunciamiento y respuestas claras y de no ser así, esta plataforma convocará a todas las entidades, organizaciones y movimientos sociales de la provincia para hacer una gran movilización que denuncie la injusticia y el desprecio que se le hace a esta provincia'.
Ayer, con la misma puesta en escena y a la entrada de los dominios de la gerente de gestión integrada de las infraestructuras sanitarias, la 'popular' Eloína Núñez, una pancarta sujetada por profesionales del sector y por políticos defendía el derecho de los ciudadanos a la sanidad pública. A la cabeza del plantel político, figuraron el secretario xeral del PSdeG, Pachi Vázquez; el portavoz nacional del BNG, Xavier Vence -ambos, por cierto, haciendo gala de su buen entendimiento en materia de reivindicaciones-; el responsable en Ourense de Compromiso por Galicia, Pérez Bouza; o el parlamentario de AGE, David Fernández Calviño.
Tras la lectura de un manifiesto, por parte de Luis Alvarez, miembro de la Plataforma, el socialista criticó la paralización 'evitable' de la inversión en sanidad por parte de la Xunta pues hay 200 millones de euros del año 2012 sin invertir 'que es dinero público que hay que destinar a la sanidad pública' y que demuestra que la 'paralización de la inversión es evitable' y no una cuestión económica, 'sino ideológica'.
Por su parte, Vence aludió a la 'irresponsabilidad' del presidente Feijóo por 'dejar pasar por delante de la puerta' fondos europeos que ahora corre el riesgo de perder y por quedar paralizada la inversión en el Complexo tras quedar desierto un concurso público para la gestión integral de espacios, que se vincula y, sobre todo, condiciona la construcción del nuevo edificio de hospitalización que, además, es imprescindible para que después se puedan ejecutar los millonarios fondos Feder destinados a innovación y tecnología.
LAS CRÍTICAS
Pachi Vázquez apeló al sector profesional sanitario ante el 'riesgo real de perder la financiación europea' por este modelo de financiación empleado por el Sergas, con el que se impone a una empresa, la que debe gestionar al final los servicios no sanitarios -limpieza, energía y mantenimiento- el pago previo de 14 millones de euros para construir el edificio de hospitalización; y como es dinero no es suficiente, la Administración se reserva después la decisión de continuarlo, en función de la disponibilidad presupuestaria.
Vázquez se refirió también al colectivo de 360 sanitarios de Vigo -allí el nuevo Hospital, con financiación privada, tiene múltiples problemas para llevarse a término-, que dieron a conocer los datos de las listas de espera 'para evidenciar que donde se dice que hay 6.000 personas pendientes de cita, en realidad hay 20.000 pacientes'.
Igualmente, Vence consideró fracasado el intento de la Xunta de buscar financiación privada, lo que deja claro, dijo, que la única posibilidad es que el sector público se comprometa a dotar de material y recursos a la sanidad y en este momento ya hay servicios claramente infradotados por irresponsabilidad de la Xunta.
Luis Alvarez dijo esperar, por tanto, respuestas de la Administración autonómica 'porque la ciudadanía de Ourense ya no quiere más maquetas, ni inauguración de planes, sino respuestas, y tampoco vale que los fondos aprobados por la UE se vayan a otro lugar'.
'Exigimos un pronunciamiento y respuestas claras y de no ser así, esta plataforma convocará a todas las entidades, organizaciones y movimientos sociales de la provincia para hacer una gran movilización que denuncie la injusticia y el desprecio que se le hace a esta provincia'.
