Los equipos participantes en el III Campeonato de Debate que acoge Ourense vivieron ayer su jornada decisiva antes de la final de hoy en el Liceo, con Putin y su política o el Museo Británico y sus obras como temas estrella.
Expourense dijo adiós ayer -hoy se traslada la competición al Liceo- a los participantes en el III Campeonato de Debate organizado por la Escuela de Finanzas Ourense Termal y patrocinado por La Región. Los 32 equipos vivieron una intensa jornada en torno a temas motivo de controversia como si la geopolítica de Putin es buena para los ciudadanos rusos -"un planteamiento que me parece muy inteligente, porque generalmente se valora el impacto sobre el resto de países", señala Francisco Valiente, responsable del club de debate de la Universidad Pontificia de Madrid- o si se debería prohibir la publicidad especializada con fines políticos -en alusión al caso de Facebook y Cambridge Analitics-.
Fueron los dos temas que cerraron las siete rondas previas -las cinco primeras se disputaron el viernes- a los cuartos de final. Unos cuartos que se tuvieron que dirimir con la moción de si fue una buena decisión incluir a China en la Organización Mundial del Comercio. La piratería digital protagonizaría las semifinales.
Francisco Valiente, de la Universidad de Comillas y uno de los encargados de actuar como juez, destacaba tras el remate de las rondas previas que "está siendo un torneo muy bonito, con debates especialmente intensos como el referente a la publicidad directa con fines políticos".
Reconoce que "siempre hay equipos noveles que, por desconocimiento del formato, pueden cometer errores" pero esa labor pedagógica con respecto a cómo debe ir el torneo "también entra en el sueldo de los jueces". Explica que "aquí no se dan discusiones de salón, hay unos reglamentos muy tasados que, además, son internacionales y hay que aprender a manejarse en estos términos". Por otra parte, Valiente destaca el valor pedagógico de estos encuentros interuniversitarios. "A mí me gusta traer aquí a mis alumnos porque aprenden otros puntos de vista, estilos diferentes".
Un torneo que ha convocado, entre otros, al único bicampeón de este tipo de torneos -en castellano y en inglés-, Antonio Fabregat, madrileño de 23 años, que se hizo con el título en español el año pasado en Guatemala y en enero de este año el Mundial en inglés, "un reto incomparable por no ser mi lengua materna". Destaca el elevado nivel de un torneo del que "los participantes alaban las instalaciones y la organización", subraya.
