La sesión plenaria que el Concello de Maceda celebra la próxima semana servirá para evalúar la concesión de la nueva explotación hotelera del castillo. El orden del día del pleno incluye la aprobación de la adjudicación del servicio (inactivo desde octubre de 2007) al único empresario que presentó su proyecto en el concurso público que sacó el Concello para la nueva concesión. Será una adjudicación provisional de cuatro años debido a que está pendiente el contencioso por la rescisión de la anterior concesión.
Tras varias previsiones de apertura que no han llegado a concretarse, la recuperación del servicio hotelero del castillo de Maceda parece ahora más inminente que nunca. La institución municipal trasladará al debate del próximo pleno, que tendrá lugar el martes día 15, la aprobación de la adjudicación de la concesión de la nueva explotación.
El Concello elaboró unas bases de contratación y sacó a concurso público la nueva concesión, al que tan sólo se presentó un proyecto, según manifestó ayer el regidor municipal, el nacionalista Xabier Oviedo. Será en la próxima sesión plenaria cuando el Concello evalúe dar luz verde a la adjudicación de este servicio al único empresario que concurrió a la concesión.
Se trata, en todo caso, de una adjudicación provisional que tendrá una duración de cuatro años. Esta medida obedece al contencioso que el Concello tiene con el anterior gestor, Ignacio Palomanes, por la rescisión de la concesión a los tres años de su explotación cuando había sido adjudicada por un periodo de 20 años. En canto non se resolva a contencioso manteremos una concesión provisional, que fixamos en catro anos porque estas cousas sempre van para largo, argumentó Xabier Oviedo.
La idea que maneja la institución macedana es que pasa dos esos años se saque a concurso una nueva adjudicación del servicio hotelero del castillo con unas bases totalmente nuevas. Fue en octubre de 2007 cuando el Concello rescindió la explotación del restaurante y hotel-monumento de la fortaleza a su hasta entonces gestor, Ignacio Palomanes, por presuntas irregularidades en la oferta del servicio. Aunque no ha recuperado esta actividad, el castillo sigue ofreciéndose como espacio público y cultural acogiendo diferentes actos de tinte cultural.
HISTORIAL
Poca actividad y mal estado
Como titular del uso y disfrute del castillo, el Concello de Maceda se decantó por hacer de la fortaleza un emblema de la localidad y en 2004 otorgó su explotación como restaurante y hotel-monumento al empresario Ignacio Palomanes. Aunque las miras estaban puestas a 20 años, tan sólo tres años después la corporación municipal acordó por unanimidad rescindir la concesión al gestor por entender que no se estaba cumpliendo con la finalidad para la que había sido adjudicado. Se inició entonces un desencuentro entre Concello y gestor que se prolongó durante dos meses.
Una vez que el ente municipal recobró el uso del castillo se vio obligado a llevar a cabo una serie de obras de mejora debido el mal estado en el que se encontraba la cubierta de la fortaleza.
El Concello elaboró unas bases de contratación y sacó a concurso público la nueva concesión, al que tan sólo se presentó un proyecto, según manifestó ayer el regidor municipal, el nacionalista Xabier Oviedo. Será en la próxima sesión plenaria cuando el Concello evalúe dar luz verde a la adjudicación de este servicio al único empresario que concurrió a la concesión.
Se trata, en todo caso, de una adjudicación provisional que tendrá una duración de cuatro años. Esta medida obedece al contencioso que el Concello tiene con el anterior gestor, Ignacio Palomanes, por la rescisión de la concesión a los tres años de su explotación cuando había sido adjudicada por un periodo de 20 años. En canto non se resolva a contencioso manteremos una concesión provisional, que fixamos en catro anos porque estas cousas sempre van para largo, argumentó Xabier Oviedo.
La idea que maneja la institución macedana es que pasa dos esos años se saque a concurso una nueva adjudicación del servicio hotelero del castillo con unas bases totalmente nuevas. Fue en octubre de 2007 cuando el Concello rescindió la explotación del restaurante y hotel-monumento de la fortaleza a su hasta entonces gestor, Ignacio Palomanes, por presuntas irregularidades en la oferta del servicio. Aunque no ha recuperado esta actividad, el castillo sigue ofreciéndose como espacio público y cultural acogiendo diferentes actos de tinte cultural.
HISTORIAL
Poca actividad y mal estado
Como titular del uso y disfrute del castillo, el Concello de Maceda se decantó por hacer de la fortaleza un emblema de la localidad y en 2004 otorgó su explotación como restaurante y hotel-monumento al empresario Ignacio Palomanes. Aunque las miras estaban puestas a 20 años, tan sólo tres años después la corporación municipal acordó por unanimidad rescindir la concesión al gestor por entender que no se estaba cumpliendo con la finalidad para la que había sido adjudicado. Se inició entonces un desencuentro entre Concello y gestor que se prolongó durante dos meses.
Una vez que el ente municipal recobró el uso del castillo se vio obligado a llevar a cabo una serie de obras de mejora debido el mal estado en el que se encontraba la cubierta de la fortaleza.
