Desde el inicio de la vacunación contra la lengua azul, la Consellería do Medio Rural vacunó 230.000 reses de bovino. Estas precisan dos dosis separadas 21 días, por lo que las explotaciones fueron visitadas dos veces, finalizando la campaña en estas explotaciones de la zona restringida. En este mismo periodo recibieron la vacuna 54.000 cabezas de ovino y las previsiones apuntan a mediados de agosto como fin de la campaña.
La Consellería puso sobre la mesa estos datos con la finalidad de desmentir las críticas de Unións Agriarias ante un posible “bloqueo” o retraso en la vacunación de esta enfermedad.
Medio Rural recuerda que inició la campaña de vacunación masiva, por vía de urgencia y también gratuita para los bovinos y ovinos mayores de tres meses en las provincias de Ourense y Pontevedra, tras detectarse tres focos de lengua azul en Galicia. Este organismo expuso que en otras comunidades autónomas, son los veterinarios libres autorizados los que aplican las vacunas, asumiendo su coste los ganaderos.
Con miras a facilitar la gestión del ganado ovino, en julio fue ampliado el periodo transitorio para enviar animales al matadero. Así, hasta el 15 de agosto, aquellas reses no vacunadas de la zona restringida pueden moverse desde las explotaciones hasta los mataderos gallegos, “sempre que non presenten síntomas compatibles coa lingua azul, estean protexidos fronte ao vector e os vehículos de transporte estean desinsectados”, informó Medio Rural.
Por otra parte, este departamento autonómico organizó un sistema público de vacunación de continuidad, diseñado para animales o bien comprados sin vacunar, o que cumplen los cuatro meses sin ser vacunados. Aclara que esta vacunación no es de carácter individual, a raíz de una petición o para animales concretos, y explica que se está desarrollando de forma organizada y planificada.
Otro aspecto al que aludió la Consellería gira sobre la posibilidad de autorizar a vacunar a todos los veterinarios clínicos o de Agrupaciones de Defensa Sanitaria (ADSG) que lo soliciten, una opción que arrancó en el mes de abril y que va dirigida a todos aquellos a quienes se dirigieron los ganaderos para adelantar la vacunación masiva o porque desearan ir vacunando a los animales que cumplían cuatro meses tras recibir la vacuna. Todos aquellos que lo solicitaron recibieron el visto bueno. Con esta última medida, los ganaderos pueden solicitar a su veterinario clínico o al de la ADSG la vacunación de animales si quieren venderlos y no desean esperar al sistema público. En este caso, la vacuna es suministrada por la Xunta al personal veterinario de forma totalmente gratuita.
