Rechazo. Es lo que sienten los vecinos de las viviendas de la Praza 200 ante las obras de remodelación que ejecutó la Consellería de Vivenda en este enclave. Dicen, y así lo manifestaron mediante quejas al Concello -con el apoyo del PP- y a la Xunta, que las pérgolas instaladas son peligrosas, los bancos defectuosos, las jardineras incómodas y la luz escasa. El teniente de alcalde, Andrés García Mata, adelanta que en septiembre prevé reunirse con el delegado de la Xunta con el fin de pautar una solución.
Este é o exemplo de cómo se poden tirar 72.000 euros á basura. Con estas palabras ilustraba ayer el viceportavoz municipal del PP, José Araújo, el sentir de las 256 familias residentes en las viviendas de la Praza 200, junto a la estación de autobuses.
Junto a sus compañeros de grupo Odilo Masid, Belén Iglesias y Aurelio Gómez Villar, José Araújo relató las quejas que día tras día recibe su grupo con respecto a las obras de remodelación de este enclave. Además de lo que consideran un dudoso gusto estético, los vecinos se sienten engañados.
De forma muy vehemente, la vicepresidenta de la asociación de vecinos As Termas, María José Martínez, relató el porqué de las afirmaciones de los ediles populares. Dijo que las obras rematadas a principios de este año no se corresponden en absoluto con el proyecto que les fue presentado en su día a los vecinos. Lo que iban a ser pérgolas de madera se convirtieron en estructuras de hierro macizo pegadas a las casas y un auténtico peligro para los niños, dijo. Lo que iba a ser iluminación indirecta se convirtió en luz de obra que deja en la penunbra a la plaza por las noches. Los bancos, de moderno diseño, ya tuvieron que ser repuestos porque la madera, tratada para zonas costeras, aquí se agrieta y suelta resina a causa del calor, explica María José Martínez. También explica sus quejas acer ca de las jardineras, dispuestas de tal modo que estorban más de lo que adornan.
Los vecinos y los ediles de la oposición criticaron también que en el Concello están haciendo oídos sordos a estas quejas, sobre todo después de que el Instituto Galego de Vivenda e Solo les remitiese una carta advirtiéndoles que las obras fueron entregadas al Concello y es esta administración la responsable de este enclave.
El teniente de alcalde y responsable de Infraestructuras, Andrés García Mata, explica que sí tienen constancia de las quejas, que transmitieron al jefe territorial de Vivenda en Ourense, y éste certificó que as obras se fixeron en base ao proxecto. No obstante, García Mata señala que tras una reunión con la asociación vecinal, el Concello adquirió el compromiso de hablar en septiembre con el delegado de la Xunta, Rogelio Martínez, con el fin de tratar de buscar una solución.
EN DATOS
El proyecto de remodelación de la Praza 200, asumido por la Consellería de Vivenda, contó con un presupuesto de 72.000 euros.
Esta urbanización, junto a la estación de autobuses, cuenta con 256 viviendas habitadas por familias.
Los vecinos transmitieron quejas al Concello y la Xunta.
Junto a sus compañeros de grupo Odilo Masid, Belén Iglesias y Aurelio Gómez Villar, José Araújo relató las quejas que día tras día recibe su grupo con respecto a las obras de remodelación de este enclave. Además de lo que consideran un dudoso gusto estético, los vecinos se sienten engañados.
De forma muy vehemente, la vicepresidenta de la asociación de vecinos As Termas, María José Martínez, relató el porqué de las afirmaciones de los ediles populares. Dijo que las obras rematadas a principios de este año no se corresponden en absoluto con el proyecto que les fue presentado en su día a los vecinos. Lo que iban a ser pérgolas de madera se convirtieron en estructuras de hierro macizo pegadas a las casas y un auténtico peligro para los niños, dijo. Lo que iba a ser iluminación indirecta se convirtió en luz de obra que deja en la penunbra a la plaza por las noches. Los bancos, de moderno diseño, ya tuvieron que ser repuestos porque la madera, tratada para zonas costeras, aquí se agrieta y suelta resina a causa del calor, explica María José Martínez. También explica sus quejas acer ca de las jardineras, dispuestas de tal modo que estorban más de lo que adornan.
Los vecinos y los ediles de la oposición criticaron también que en el Concello están haciendo oídos sordos a estas quejas, sobre todo después de que el Instituto Galego de Vivenda e Solo les remitiese una carta advirtiéndoles que las obras fueron entregadas al Concello y es esta administración la responsable de este enclave.
El teniente de alcalde y responsable de Infraestructuras, Andrés García Mata, explica que sí tienen constancia de las quejas, que transmitieron al jefe territorial de Vivenda en Ourense, y éste certificó que as obras se fixeron en base ao proxecto. No obstante, García Mata señala que tras una reunión con la asociación vecinal, el Concello adquirió el compromiso de hablar en septiembre con el delegado de la Xunta, Rogelio Martínez, con el fin de tratar de buscar una solución.
EN DATOS
El proyecto de remodelación de la Praza 200, asumido por la Consellería de Vivenda, contó con un presupuesto de 72.000 euros.
Esta urbanización, junto a la estación de autobuses, cuenta con 256 viviendas habitadas por familias.
Los vecinos transmitieron quejas al Concello y la Xunta.
