LR- Las carreteras de la provincia acumulan 180 accidentes de circulación en lo que va de año y en los que perdieron la vida un total de 24 personas y otras 85 resultaron heridas graves. Al total de siniestros hay que sumarle 217 personas heridas leves, según los datos que maneja la Guardia Civil de Tráfico.
La mitad de los fallecidos eran jóvenes con edades de entre 18 y 30 años. La misma proporción se da entre los heridos graves, entre los que también predominan personas con más de 60 años.
La estadística de accidentes de circulación que maneja la Dirección General de Tráfico en las carreteras de la provincia produce escalofríos: 20 personas fallecidas y 80 heridas graves en 176 siniestros en lo que va de año. A ellos hay ahora que sumar los cuatro fallecidos en los accidentes que se registraban ayer y los cinco heridos graves, además del padre e hija de Padrenda que fallecieron en abril en una colisión de su coche con un camión en el municipio portugués de Melgaço, localidad limítrofe con Padrenda. Padre e hija regresaban a casa después de una jornada ferial del otro lado de la ’raia’. En esos 176 siniestros se producían además 217 heridos con carácter leve.
El mes más negro fue junio con 29 accidentes de circulación, casi a uno por día. Por contra, el de menos siniestros era enero en el que, según los datos de Tráfico, se registraron sólo 12. ’La mayoría de los accidentes son por falta de precaución, por falta de responsabilidad al volante y por no respetar las señales viarias’, explicaron ayer fuentes de Tráfico.
Jóvenes implicados Nueve de los 20 fallecidos en los primeros meses del año eran jóvenes con edades comprendidas entre los 18 y los 30 años. Otros seis superaban los 60 y cinco de ellos tenían edades de entre 30 y 60 años. La misma proporción se repite entre los heridos con carácter grave, dado que de los 80 registrados en los últimos siete meses, 46 tienen menos de 30 años.
