El mundo de los e-wok

Un wok al fuego

Es una herramienta en la cocina que desde que la descubrí, nunca ha faltado en mi lista de recursos para el día a día. Sigo a varios cocineros de la cocina oriental y es un arma que la utilizan para prácticamente todo lo que necesitan cocinar. 

A la hora de preparar deliciosos platos salteados es esencial tener un wok en buenas condiciones. Y desde Ourensanos queremos asesoraros sobre cómo encontrar el más adecuado y cómo prepararlo para cocinar las recetas más espectaculares que nos puede ofrecer esta maravilla. 

El salteado es una forma rápida, sencilla y sana de cocinar. Al hablar de rápida, lo digo porque una vez calentado el wok, en unos minutos la receta estará lista. Sencilla porque generalmente se hace una buena mise en place (preparación previa de los alimentos) antes de comenzar a cocinar y sana, porque ese reducido tiempo de cocción hace que los alimentos estén perfectamente cocinados a la par que mantienen casi intactas sus propiedades nutricionales y organolépticas. 

Tengo gente cercana que me pide consejo sobre dónde comprar el wok, y más que sobre dónde comprarlo, debemos tener en cuenta qué tipo de wok debemos comprar. Los woks profesionales son cóncavos y tienen un sistema de fuego/soplete directo. A los que tenemos cocinas de inducción, vitrocerámicas o de gas, es algo que se nos escapa a nuestras opciones así que debemos elegir un recipiente adaptado a nuestra infraestructura. Existen woks de una gran variedad de tamaños y acabados, que van desde el wok tradicional de acero de carbono hasta los de hierro colado, acero inoxidable, acero fundido o anodizado, antiadherentes o incluso woks eléctricos. Los tradicionales de base redonda son ideales para las cocinas de gas, mientras que los de base plana son perfectos para cocinas eléctricas. 

La curación del wok

No podemos comprar nuestro wok y utilizarlo tal cual desde el primer momento. Cuando adquirí mi primer wok hace unos cuantos años, resulto que pensé que era de mala calidad porque se pegaban las cosas. Y lo único que hice mal fue no curarlo. Los de acero de carbono y hierro deben prepararse antes de utilizarlos por primera vez. En primer lugar, tenemos que lavar el wok en agua caliente y jabonosa para eliminar cualquier resto de suciedad o grasa y secarlo muy bien. Acto seguido, ponemos el wok en el fuego vivo y cuando esté caliente, con papel de cocina, extendemos una cucharada de aceite por toda la superficie interior. Seguimos calentándolo durante unos 8-10 minutos, frotándolo con un trapo de cocina limpio cada poco. Este primer paso genera bastante humo ya que se está quemando el aceite, así que debemos tener el extractor puesto o las ventanas abiertas (si es posible). Si lo dejamos enfriar y repetimos el proceso, el wok quedará listo para utilizarlo. 

Para su limpieza, debemos hacerlo en agua caliente y jabonosa, con una espuma suave o paño de cocina. Ni locos utilizaremos un estropajo fino, grueso o algo que pueda hacer que se ralle. Lo secamos muy bien y antes de guardarlo, debemos aplicar una capa fina de aceite con un papel de cocina por toda la superficie interior, evitando así que se oxide.

Atendiendo a nuestras ganas, tiempo y virtudes culinarias, podemos adentrarnos en apliques como rejillas, pinzas, vaporeras, tapas, mil y una salsas y una y mil recetas, pero, antes de nada, para curarse en salud con el wok, curaremos el wok para que tenga salud. 

Te puede interesar