Imagino que muchas y muchos os identificáis con momentos de picoteo a lo largo del día. Puede ser un picoteo entre horas porque tenemos algo en el cajón del despacho, porque estamos en casa y damos algún paseo a la cocina, porque salimos y picamos en una máquina de “vending” o con algo que nos sirven…
Picotear puede convertirse en un hábito poco saludable si nos lleva a comer cada poco tiempo y a consumir opciones poco nutritivas.
El reto de esta semana es para animaros a reflexionar acerca de vuestra relación con el picoteo y valorar si es bueno mejorarla. Quizás haya que revisar las ingestas del día para ver si no sacian lo suficiente, si no se disfruta de las comidas, si hay hambre emocional…
En caso de hacerlo, te invitamos a que sea de una manera consciente y así el resultado podrá ser más adecuado.
