Los indicadores de salud son más desfavorables para la comunidad gitana que para el resto de la población española. Mientras que menos del 5 por ciento de los hombres españoles padecen depresión, esta patología afecta a más del 10 por ciento de los hombres de etnia gitana.
Lo mismo ocurre con el colesterol, que afecta a más del 20 por ciento de los gitanos frente al 10 por ciento del resto de la población; y la hipertensión, que la sufren más de un 15 por ciento de los gitanos, porcentaje que dobla al del resto de españoles.
La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, presentó hoy el estudio Hacia la equidad de la salud. Disminuir las desigualdades en una generación en la comunidad gitana que demuestra que este colectivo, con respecto al conjunto de la ciudadanía, tiene mayor prevalencia a padecer enfermedades crónicas, riesgo de accidente y problemas de salud-buco dental, entre otras patologías.
Con respecto a las mujeres de etnia gitana, el estudio afirma que son ella las que refieren un peor estado de salud. Sin embargo, y debido a razones culturales y de otra índole, las gitanas poseen menores tasas de abstención de consumo de bebidas alcohólicas y de tabaco. Por el contrario, la obesidad y el sobrepeso les afecta mayoritariamente, ya que frecuentemente siguen pautas no recomendables de alimentación.
Jiménez, que presentó el acto junto al secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, el presidente de la Fundación Secretariado Gitano, Pedro Puente; y el vicepresidente del Consejo estatal del Pueblo Gitano, Antonio Vázquez, señaló que la integración en un mismo ministerio de la Sanidad y la Política Social acelerará la lucha contra la desigualdad del pueblo gitano.
El estudio revela que los determinantes sociales como la educación, el empleo, la vivienda, la estabilidad económica o la cultura inciden en los indicadores de salud del pueblo gitano, de ahí que Jiménez destacara que desde el Ministerio se seguirá trabajando para subsanar las desigualdades.
En este sentido, el presidente de la Fundación Secretariado Gitano, Pedro Puente, destacó que la salud y el empleo son tres ejes clave para la verdadera inclusión de los gitanos, ya que según su parecer aún falta mucho para que la población gitana alcance los estándares de salud de la población general. En su criterio es necesario hacer más accesibles los servicios sanitarios y formar a los especialistas para saber tratar a las familias gitanas. Hay dificultad de acceso a los servicios sanitarios, a veces por falta de adaptación y otras, incluso, por discriminación, expuso.
La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, presentó hoy el estudio Hacia la equidad de la salud. Disminuir las desigualdades en una generación en la comunidad gitana que demuestra que este colectivo, con respecto al conjunto de la ciudadanía, tiene mayor prevalencia a padecer enfermedades crónicas, riesgo de accidente y problemas de salud-buco dental, entre otras patologías.
Con respecto a las mujeres de etnia gitana, el estudio afirma que son ella las que refieren un peor estado de salud. Sin embargo, y debido a razones culturales y de otra índole, las gitanas poseen menores tasas de abstención de consumo de bebidas alcohólicas y de tabaco. Por el contrario, la obesidad y el sobrepeso les afecta mayoritariamente, ya que frecuentemente siguen pautas no recomendables de alimentación.
Jiménez, que presentó el acto junto al secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, el presidente de la Fundación Secretariado Gitano, Pedro Puente; y el vicepresidente del Consejo estatal del Pueblo Gitano, Antonio Vázquez, señaló que la integración en un mismo ministerio de la Sanidad y la Política Social acelerará la lucha contra la desigualdad del pueblo gitano.
El estudio revela que los determinantes sociales como la educación, el empleo, la vivienda, la estabilidad económica o la cultura inciden en los indicadores de salud del pueblo gitano, de ahí que Jiménez destacara que desde el Ministerio se seguirá trabajando para subsanar las desigualdades.
En este sentido, el presidente de la Fundación Secretariado Gitano, Pedro Puente, destacó que la salud y el empleo son tres ejes clave para la verdadera inclusión de los gitanos, ya que según su parecer aún falta mucho para que la población gitana alcance los estándares de salud de la población general. En su criterio es necesario hacer más accesibles los servicios sanitarios y formar a los especialistas para saber tratar a las familias gitanas. Hay dificultad de acceso a los servicios sanitarios, a veces por falta de adaptación y otras, incluso, por discriminación, expuso.
