El Gobierno y el Partido Popular coincidieron ayer en felicitar a la Iglesia por el 'éxito' de la Jornada Mundial de la Juventud, mientras que el PSOE destacó el 'respeto' entre los planteamientos del Vaticano y del Ejecutivo e IU criticó la 'sumisión' de todas las instituciones del Estado.
El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, resaltó el interés de la Iglesia de que el mensaje del papa en esta visita no tuviera contenido político, sino que estuviera dirigido a los jóvenes y fuera una pastoral católica. Por ello, el papa, dijo Jáuregui, ha sido 'profundamente respetuoso con cualquier ámbito político de España' y ese 'respeto' también se lo ha manifestado el Gobierno, que ha colaborado con la Iglesia 'con absoluta lealtad'.
Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, consideró también que la Jornada Mundial de la Juventud ha sido un 'éxito rotundo' y destacó 'la alegría' y el 'buen ambiente' de los participantes en la misma, algo 'realmente reconfortante -dijo- en los tiempos que vivimos'. En declaraciones a la Cadena Cope, el líder del PP resaltó 'lo que transmitían las caras de la gente' con la que se encontró durante estos días en Madrid. 'En el mundo hay mucha gente buena que merece la pena y merece ser respetada y trabajar por ellas', aseguró.
CRÍTICAS
Las críticas a la vista del papa vinieron de Izquierda Unida, partido desde el que se lamenta la 'sumisión' de todas las instituciones del Estado a la jerarquía de la iglesia católica y el 'flagrante incumplimiento' del precepto constitucional de que España es un Estado aconfesional.
Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, consideró también que la Jornada Mundial de la Juventud ha sido un 'éxito rotundo' y destacó 'la alegría' y el 'buen ambiente' de los participantes en la misma, algo 'realmente reconfortante -dijo- en los tiempos que vivimos'. En declaraciones a la Cadena Cope, el líder del PP resaltó 'lo que transmitían las caras de la gente' con la que se encontró durante estos días en Madrid. 'En el mundo hay mucha gente buena que merece la pena y merece ser respetada y trabajar por ellas', aseguró.
CRÍTICAS
Las críticas a la vista del papa vinieron de Izquierda Unida, partido desde el que se lamenta la 'sumisión' de todas las instituciones del Estado a la jerarquía de la iglesia católica y el 'flagrante incumplimiento' del precepto constitucional de que España es un Estado aconfesional.
