Cuando el 14 de mayo Feve (Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha) ponga en servicio su nuevo producto Transcantábrico Gran Lujo podrá presumir de tener el tren de vía estrecha más lujoso del mundo. Compuesto por 14 vagones, además de la locomotora diésel y el coche de servicio, mide unos 250 metros, destinados a albergar durante una semana a viajeros de todo el mundo que puedan pagar los más de 3.500 euros por persona que cuesta el recorrido por la costa cantábrica hispana, ya sea con salida de San Sebastián, en el País Vasco, y llegada a Santiago de Compostela, en Galicia, o viceversa.
Inicialmente el recorrido entre la capital guipuzcoana y Bilbao se hace por carretera en el autocar que acompaña de forma permanente a este Transcantábrico. Sin embargo, en breve se podrá hacer ese recorrido en tren gracias al acuerdo que están a punto de cerrar Feve y Eusko Trenbideak, la empresa propietaria de las infraestructuras en el País Vasco para el uso por parte de Feve de las vías.
'Este nuevo tren de Gran Lujo nació un poco por casualidad', según explica Jose Antonio Rodríguez, responsable de trenes turísticos de la empresa pública ferroviaria. Porque lo cierto es que el nuevo tren es hijo del que inició su andadura en 1982 y que tenía que ser ya reformado para superar el paso del tiempo.
INVERSIÓN DE 2,5 MILLONES
El Transcantábrico inicial, además de los camarotes convencionales, ya de por sí bastante lujosos, tenía dos suites que, según Rodríguez, tuvieron excelente aceptación por parte de los usuarios y de ello se dedujo que era un servicio con demanda. La reforma de los vagones hubiera costado un millón de euros, y su transformación en suites de gran lujo fue de 2,5 millones, precisó el directivo. Así que tras cuatro meses de trabajo en los propios talleres de Feve, en marzo quedaron casi listos para su uso por parte de los viajeros.
Se podrá pensar que en tiempos de crisis, y con un precio que el propio Rodríguez consideró elevado, el tren tendría problemas para cubrir sus plazas, pero las cifras revelan que no es así, porque el número de solicitudes supera ya el 80 por ciento para su primer recorrido. Curiosamente la mayor parte de las peticiones provienen de un país emergente como México, ya a gran distancia se sitúan Australia y EE.UU. y, por lo que se refiere a Europa, Alemania y el Reino Unido son los países con más demanda. La presencia tan importante de mexicanos se explica, según Rodríguez, por los vínculos de esta zona con el país americano.
'Este nuevo tren de Gran Lujo nació un poco por casualidad', según explica Jose Antonio Rodríguez, responsable de trenes turísticos de la empresa pública ferroviaria. Porque lo cierto es que el nuevo tren es hijo del que inició su andadura en 1982 y que tenía que ser ya reformado para superar el paso del tiempo.
INVERSIÓN DE 2,5 MILLONES
El Transcantábrico inicial, además de los camarotes convencionales, ya de por sí bastante lujosos, tenía dos suites que, según Rodríguez, tuvieron excelente aceptación por parte de los usuarios y de ello se dedujo que era un servicio con demanda. La reforma de los vagones hubiera costado un millón de euros, y su transformación en suites de gran lujo fue de 2,5 millones, precisó el directivo. Así que tras cuatro meses de trabajo en los propios talleres de Feve, en marzo quedaron casi listos para su uso por parte de los viajeros.
Se podrá pensar que en tiempos de crisis, y con un precio que el propio Rodríguez consideró elevado, el tren tendría problemas para cubrir sus plazas, pero las cifras revelan que no es así, porque el número de solicitudes supera ya el 80 por ciento para su primer recorrido. Curiosamente la mayor parte de las peticiones provienen de un país emergente como México, ya a gran distancia se sitúan Australia y EE.UU. y, por lo que se refiere a Europa, Alemania y el Reino Unido son los países con más demanda. La presencia tan importante de mexicanos se explica, según Rodríguez, por los vínculos de esta zona con el país americano.
