Varios días después de que las milicias apoyadas por el Gobierno sudanés atacasen varios pueblos de Gharb Darfur (Darfur Oeste), cientos de niños permanecen desaparecidos, según el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), citado por la agencia de noticias de la ONU, IRIN.
'Hay un número desconocido de menores entre los 12 y los 18 años que permanecen desaparecidos, especialmente chicos.
'Hay un número desconocido de menores entre los 12 y los 18 años que permanecen desaparecidos, especialmente chicos.
nadie sabe que les ha pasado a esos niños', advirtió el director de UNICEF en Gharb Darfur, Naqibullah Safi. Las primeras informaciones indican que han desaparecido unos 800 niños, pero probablemente el numero real es mayor, indicó UNICEF en un comunicado emitido tras una misión en las localidades de Sirba y Abu Surouj.
'Una de las mayores preocupaciones de UNICEF es el cuidar de el gran número de menores que han quedado huérfanos o que han sido abandonados por sus padres, o que se han perdido en la confusión de los últimos días', aseguró la agencia.
CONCLUISIONES DEL EQUIPO DE LA ONU
El equipo de UNICEF encontró que habían incendiado las casas y que miles de habitantes habían huido de los pueblos. 'Inicialmente la población necesita alimentos y medicinas, hay casos de malnutrición, pero el problema más común es que la gente fue quemada', aseguró Safi.
'Hay algunas bajas civiles, pero el número exacto no se conoce. Muchos de los refugios de Sirba se han quemado, y entre el 60 y el 70 por ciento de Abu Surouj también', agregó. Los ataques provocaron además una evacuación en masa de la región, por lo que sólo quedaron algunas miles de personas en Abu Surouj. 'Hay indicaciones de que unas 30.000 personas se han visto desplazadas', remarcó Sirba.
Un miembro del personal nacional del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) murió durante los combates en Seleia. Según las autoridades sudanesas, los ataques del pasado 8 de febrero estaban destinados a aniquilar a las fuerzas del opositor Movimiento para la Justicia y la Igualdad (MJI) de las localidades de Abu Surouj, Sirba y Seleia. Aun así, miembros del MJI aseguraron que el objetivo fueron principalmente civiles.
'Una de las mayores preocupaciones de UNICEF es el cuidar de el gran número de menores que han quedado huérfanos o que han sido abandonados por sus padres, o que se han perdido en la confusión de los últimos días', aseguró la agencia.
CONCLUISIONES DEL EQUIPO DE LA ONU
El equipo de UNICEF encontró que habían incendiado las casas y que miles de habitantes habían huido de los pueblos. 'Inicialmente la población necesita alimentos y medicinas, hay casos de malnutrición, pero el problema más común es que la gente fue quemada', aseguró Safi.
'Hay algunas bajas civiles, pero el número exacto no se conoce. Muchos de los refugios de Sirba se han quemado, y entre el 60 y el 70 por ciento de Abu Surouj también', agregó. Los ataques provocaron además una evacuación en masa de la región, por lo que sólo quedaron algunas miles de personas en Abu Surouj. 'Hay indicaciones de que unas 30.000 personas se han visto desplazadas', remarcó Sirba.
Un miembro del personal nacional del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) murió durante los combates en Seleia. Según las autoridades sudanesas, los ataques del pasado 8 de febrero estaban destinados a aniquilar a las fuerzas del opositor Movimiento para la Justicia y la Igualdad (MJI) de las localidades de Abu Surouj, Sirba y Seleia. Aun así, miembros del MJI aseguraron que el objetivo fueron principalmente civiles.
