Los socialistas creen que está muy alejado del parque empresarial, lo que niegan los 'populares'
El proyecto de la futura autovía A-76, que comunicará Ponferrada con Ourense, comienza a tomar forma y con el diseño comienza la polémica. En el Concello de Rubiá, en el que fue diseñado uno de los dos primeros tramos que están siendo redactados, la distancia que separa el desvío de la infraestructura al parque empresarial no gustó demasiado a la oposición socialista. Las quejas partieron de la concejala socialista Raquel Méndez Ramos, quien explicó que los usuarios del parque empresarial deberán utilizar la actual OU-622, que comunica O Barco con Rubiá y A Veiga de Cascallá.
La representante socialista lamentó que los conductores que se desplacen en sentido O Barco deberán volver para atrás para acceder al polígono industrial. También mostró su extrañeza ante el desplazamiento de la calzada de la futura autovía, inicialmente diseñada sobre la carretera N-120.
El alcalde, Elías Rodríguez Núñez, del Partido Popular, explicó que la localización del acceso apenas varió respecto a la reflejada en el anteproyecto. Indicó que la variación introducida contempla el desplazamiento de la autovía hacia la derecha, en sentido O Barco de Valdeorras, así como la construcción de dos rotondas, una a cada lado de la infraestructura. Estas están dibujadas a la misma altura para la que fue proyectada la única rotonda prevista inicialmente.
Elías Rodríguez explicó que el tramo de la carretera OU-622 que deberán recorrer los usuarios del parque empresarial no supera los 600 metros. "Ao polígono nin o beneficia, nin o perxudica", explicó.
También dijo que, si en un futuro el parque empresarial es ampliado, este tendría dos accesos. Uno continuaría siendo el diseñado actualmente, en tanto que el segundo permitiría acceder directamente y estaría localizado en la prolongación de la actual vía central del polígono industrial, aprovechando un camino.
Parque y pueblo compartirán el enlace
Las dos rotondas proyectadas para el acceso al parque empresarial también servirán para enlazar la autovía con el casco urbano de Rubiá, según explicó el alcalde. Elías Rodríguez también dijo que los técnicos que trabajan en la redacción del proyecto del tramo de la A-76 comprendido entre A Veiga de Cascallá y O Barco ya visitaron la Casa Consistorial. Acudieron para conocer la ubicación de los distintos servicios municipales que, como las redes de abastecimiento o aguas residuales, pudieran resultar afectados por la obra. En todo caso, en el Concello explican que el trazado manejado podría sufrir alguna modificación, al afectar a una zona de protección arqueológica. Con una longitud de 8,4 kilómetros, la redacción del proyecto de este tramo de la A-76 fue presupuestado en 26 millones de euros.
