La Feira de Produtos Tradicionais de Galicia e o Norte de Portugal, del Eixo Atlántico, abrió ayer sus puertas en la playa fluvial del río Sil, en O Barco. Allí, montaron sus puestos 27 productores, superando los 18 de la edición de 2021. En su interior puede conseguirse un amplio abanico de productos artesanos: queso, vino, aceite, mermelada y cosmética natural, shitake, castañas, bica, miel, licores, dulces, conservas de ave y de pescado, aceite, cerveza artesana, embutidos y artículos de artesanía.
El concejal de Promoción Económica, Eladio Santos, se refirió a este tipo de ferias como un lugar que facilita el intercambio directo de consumidores y productores, con artículos que “non se atopan nos circuitos xerais a prezos interesantes”. A su vez, el alcalde, Alfredo García, apostó por el consumo de productos locales “para que o rural teña vida. Se seguimos coa filosofía de mercar o máis barato sen importar de onde ven, iremos ao desastre”, dijo.
A la inauguración acudió Tiago Bessa, jefe del Gabinete da Presidencia do Concello de Vila Flor (Portugal), representado con cinco puestos. Destacó la importancia que en su tierra dan a este tipo de ferias, pues con unos 6.000 habitantes, la última citó a 128 productores, 98 de ellos de Vila Flor, y recibió 23.000 visitas en cuatro días. “É moi importante a presenza neste tipo de eventos para publicitar la marca Vila Flor”, dijo.
Los productores resaltan un cierto cambio de hábitos en el consumo a raíz de la pandemia de covid. “La gente sale más, se interesa más por estos productos y come muchos más productos gallegos”, dijo Enrique Arroyo, de Shitake Trives. A su vez, Antonio Dobao, de Barbudos Coop., comentó que “dende a pandemia, a xente aposta por produtos cercanos”.
