Los barracones que habitaron los obreros de Cedie SA, en O Barco, serán demolidos por la empresa. Esta iniciativa fue acordada después de que el último ocupante de las 20 viviendas de los operarios la abandonase, el pasado mes de diciembre. La dirección acordó derribarlos ante el estado de abandono en que se encontraban, aunque mantiene la capilla y el local anexo. Sin embargo, estos trabajos no conllevan la construcción de la urbanización que la empresa proyectó para este lugar, según su dirección.
El último ocupante de los barracones construidos por la empresa química barquense Cedie para los obreros los abandonaba el mes de diciembre último. Esta decisión permitió a la dirección plantearse comenzar su derribo, debido fundamentalmente al estado de abandono en que se encuentra la mayor parte de las 20 viviendas. Esta circunstancia era apuntada ayer por el director general, Isidoro Pardilla.
El primer paso fue solicitar el permiso municipal al Concello, un visto bueno que fue aprobado por la comisión de gobierno que preside Alfredo García. El proyecto presentado a este órgano refleja la demolición de los antiguos bloques de viviendas y tiene un presupuesto de 33.720 euros. El plazo máximo propuesto a Cedie para derribar los edificios es de 24 meses.
La dirección de la fábrica barquense acometerá el derribo de las viviendas de forma paulatina. Se trata de ir echándolas abajo, pues ahora ya no vive nadie, comentó a este respecto Isidoro Pardilla.
Estos trabajos de demolición no serán los primeros que se acometen en este recinto. Hace más de dos años la empresa derribó el antiguo club social, donde estaba ubicada la cafetería del poblado. El mal estado de conservación del edificio y el peligro que suponía obligaron a derribarlo.
Una construcción que no tocará la maquinaria es la de la capilla y el local anexo, donde ensaya el coro de la parroquia de Veigamuiños y que albergó la escuela del poblado.
En todo caso, el director gerente de Cedie aclara que la demolición de los bloques de viviendas no conlleva la inmediata ejecución de los proyectos diseñados para este lugar, centrados fundamentalmente en su urbanización y en la construcción de edificios de viviendas.
La recuperación de 17 hectáreas
Varios trabajadores retiraban las tejas que cubren las casas que usaron los obreros de Cedie. Serán reutilizadas en la reconstrucción del horno de cal, que la empresa reconvertirá en museo. Estos trabajos son una pequeña parte de un ambicioso proyecto que pretende recuperar las 17 hectáreas que posee en la avenida de Galicia de O Barco.
Esta iniciativa incluye la construcción de la fábrica de Cedisolar, sociedad participada por Cedie (38,25%) Rioglass Solar Holding (51,75%) y XesGalicia (10%), que prevé invertir 32 millones de euros. A la colocación de la primera piedra, que se desarrolló el cinco de diciembre del 2008, asistió el conselleiro de Innovación e Industria, Fernando Blanco, acompañado por el consejero delegado de Unión Fenosa, Honorato López Isla.
El primer paso fue solicitar el permiso municipal al Concello, un visto bueno que fue aprobado por la comisión de gobierno que preside Alfredo García. El proyecto presentado a este órgano refleja la demolición de los antiguos bloques de viviendas y tiene un presupuesto de 33.720 euros. El plazo máximo propuesto a Cedie para derribar los edificios es de 24 meses.
La dirección de la fábrica barquense acometerá el derribo de las viviendas de forma paulatina. Se trata de ir echándolas abajo, pues ahora ya no vive nadie, comentó a este respecto Isidoro Pardilla.
Estos trabajos de demolición no serán los primeros que se acometen en este recinto. Hace más de dos años la empresa derribó el antiguo club social, donde estaba ubicada la cafetería del poblado. El mal estado de conservación del edificio y el peligro que suponía obligaron a derribarlo.
Una construcción que no tocará la maquinaria es la de la capilla y el local anexo, donde ensaya el coro de la parroquia de Veigamuiños y que albergó la escuela del poblado.
En todo caso, el director gerente de Cedie aclara que la demolición de los bloques de viviendas no conlleva la inmediata ejecución de los proyectos diseñados para este lugar, centrados fundamentalmente en su urbanización y en la construcción de edificios de viviendas.
La recuperación de 17 hectáreas
Varios trabajadores retiraban las tejas que cubren las casas que usaron los obreros de Cedie. Serán reutilizadas en la reconstrucción del horno de cal, que la empresa reconvertirá en museo. Estos trabajos son una pequeña parte de un ambicioso proyecto que pretende recuperar las 17 hectáreas que posee en la avenida de Galicia de O Barco.
Esta iniciativa incluye la construcción de la fábrica de Cedisolar, sociedad participada por Cedie (38,25%) Rioglass Solar Holding (51,75%) y XesGalicia (10%), que prevé invertir 32 millones de euros. A la colocación de la primera piedra, que se desarrolló el cinco de diciembre del 2008, asistió el conselleiro de Innovación e Industria, Fernando Blanco, acompañado por el consejero delegado de Unión Fenosa, Honorato López Isla.
