El incendio, en un inmueble deshabitado, arrasó la oficina del presidente de colocadores de pizarra

Un fuego obligó a desalojar dos casas en O Barco

Operarios de los bomberos de Valdeorras trabajaron ayer a la mañana para desescombrar el edificio. (Foto: J. M. CRUZ)
Los vecinos de dos inmuebles ubicados en O Barco tuvieron que ser desalojados en la madrugada de ayer por razones de seguridad a causa de un incendio iniciado en una casa colindante que estaba deshabitada pero en la que se hallaba la oficina del presidente de la Asociación nacional de Colocadores de Pizarra, Miguel Angel Fernández, oficina que ocupaba la planta baja, ubicada en la céntrica calle Eloy Rodríguez Barrios.
El fuego se inició alrededor de las cuatro y media de la madrugada y fue un vecino del edificio colindante el que dio aviso a los bomberos, alarmado por el ruido producido por la cubierta al desplomarse debido a las llamas.

Cuando llegaron los Bomberos de A Rúa, y Protección Civil y Guardia Civil de O Barco, ardía ya la práctica totalidad del edificio, construido en el año 1916, dado que, según indicó un portavoz de los medios de extinción 'su estructura de madera hizo que el fuego se propagase con rapidez'. El inmueble está dividido en dos casas de dos plantas, aunque sólo se utilizaba el bajo de una de ellas, donde se hallaba la oficina.

A causa del incendio, cuyas causas se desconocen, fueron desalojados los dos edificios colindantes, el que se hallaba a la derecha de la fachada de la vivienda, y otro en la parte posterior, 'por seguridad', aunque, según indicaron estas mismas fuentes, pudieron volver a sus casas media hora después.


UNA HORA DESPUÉS

El fuego fue controlado una hora después, aunque durante toda la mañana permanecieron dotaciones en el lugar donde se produjo el fuego removiendo escombros.

Los bomberos también buscaron los archivos de la empresa que podrían haber quedado intactos 'debajo de los escombros', mientras continuaron durante la jornada con las labores de desescombro, después de que cediese el tejado sobre la primera planta, y ésta sobre el bajo, donde se hallaba la oficina.

Vecinos de las inmediaciones barajan la posibilidad de que fuese un vagabundo el que provocase involuntariamente el fuego porque las plantas altas del inmueble, que está en venta, carecen de luz eléctrica.

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