Fernando B.B., de 33 años y con domicilio en el País Vasco, abandonó a las 14.10 horas de ayer el Juzgado mixto de Trives, donde negó que acudiese la noche del 20 de abril del 2001 a los jardines de Cabo da Vila, en Viana. Escenario en el que Montserrat Martínez, de sólo 21 años, perdió la vida a manos de Manuel Mouriño.
La jueza lo dejó en libertad con la obligación de personarse en sede judicial todos los días 1 y 15 de mes, imputado por un delito de encubrimiento en el el procedimiento con jurado abierto por el homicidio de la joven.
Cinco horas antes, Fernando B.B. se personaba en el Juzgado trivés. Llegó solo, sin abogado, lo que obligó a recurrir del turno de oficio, retrasando unas cuatro horas su declaración.
Su defensa la asumió el letrado ourensano Agustín Raposo, quien apuntó que su representado declaró que no tiene nada que ver con los hechos ocurridos en los jardines de Cima de Vila. Añadió que esta supuesta presencia sólo consta en la declaración del homicida confeso de la joven vianesa, Manuel Mouriño Faria, a quien conocía del pueblo.
El abogado explicó que Fernando B.B. lo está pasando mal. Esta situación le está causando problemas personales, pues tiene trabajo y familia. También recordó que los hechos ocurrieron hace ya casi una década y se quejó de que la imputación es consecuencia únicamente de la declaración de una persona.
Cinco horas antes, Fernando B.B. se personaba en el Juzgado trivés. Llegó solo, sin abogado, lo que obligó a recurrir del turno de oficio, retrasando unas cuatro horas su declaración.
Su defensa la asumió el letrado ourensano Agustín Raposo, quien apuntó que su representado declaró que no tiene nada que ver con los hechos ocurridos en los jardines de Cima de Vila. Añadió que esta supuesta presencia sólo consta en la declaración del homicida confeso de la joven vianesa, Manuel Mouriño Faria, a quien conocía del pueblo.
El abogado explicó que Fernando B.B. lo está pasando mal. Esta situación le está causando problemas personales, pues tiene trabajo y familia. También recordó que los hechos ocurrieron hace ya casi una década y se quejó de que la imputación es consecuencia únicamente de la declaración de una persona.