Lucio Ángel Vallejo Balda, administrador del Obispado de Astorga desde 1991 y secretario del consejo diocesano de asuntos económicos, una tarea que compaginó con la de párroco de 13 parroquias leonesas, acaba de ser nombrado secretario de la Prefectura de Asuntos Económicos de la Santa Sede, un cargo para el cual fue elegido por el papa Benedicto XVI. Vallejo Balda deberá incorporarse a dicho puesto el próximo 5 de octubre, fecha fijada para la toma de posesión en el Vaticano.
'Cuando me lo dijeron me causó sorpresa. No me lo esperaba', dijo ayer Lucio Ángel Vallejo. Nacido en 1961, en Villamediana de Iregua (Logroño), fue ordenado sacerdote por la Diócesis de Astorga en 1987. Se licenció en Teología en la Facultad de Teología del Norte de España, doctorándose en la Universidad Pontificia de Salamanca y realizando el doctorado de Derecho en la Universidad Nacional de Educación a Distancia y en la Universidad de Salamanca.
Tras 25 años en la diócesis astorgana, afirmó conocerla 'perfectísimamente. Son muchos años, es media vida', dijo. Su experiencia le permitió hablar de 'la desplobación de los núcleos rurales' como el problema más grave de la diócesis. 'Mantener el patrimonio es muy complejo. La Diócesis está haciendo un tremendo esfuerzo. Hay casi 1.500 edificios y mantenerlos es muy complicado', explicó.
Subrayó que de estos esfuerzos también se benefició Valdeorras, donde 'la Diócesis adquirió la capilla de San Francisco Blanco, en Outarelo, y mantiene el colegio Pablo VI. Son esfuerzos continuos. En O Barco hemos abierto una librería diocesana'. No faltó una referencia suya para el santuario bolés de As Ermidas. 'Está en proceso de restauración. Esperamos que con la declaración de bien de interés cultural las administraciones ayudarán', dijo. En todo caso, Lucio Ángel Vallejo continuará manteniendo contacto con la diócesis. 'Que no quepa la menor duda de que barreré para casa, para la tierra a la que uno le tiene cariño', aseguró.
ÚLTIMOS DETALLES
Dedicará los próximos días a ultimar su traslado al Vaticano. 'Esperamos hacerlo bien y no defraudar la confianza que el Papa ha puesto en mí', dijo, tras explicar que el 5 de octubre tendrá su primer contacto con Benedicto XVI.
La marcha de Vallejo Balda deja un sabor agridulce en Astorga. El obispo, Camilo Lorenzo Iglesias, resaltó la labor del ecónomo de la Diócesis en los últimos 20 años. 'Creo que lo puede hacer bien. Tiene mucha iniciativa y capacidad de administrar', dijo. Refiriéndose a su designación, añadió que 'la sentí mucho, por la escasez de sacerdotes y porque no es fácil encontrar un economista como él'.
Tras 25 años en la diócesis astorgana, afirmó conocerla 'perfectísimamente. Son muchos años, es media vida', dijo. Su experiencia le permitió hablar de 'la desplobación de los núcleos rurales' como el problema más grave de la diócesis. 'Mantener el patrimonio es muy complejo. La Diócesis está haciendo un tremendo esfuerzo. Hay casi 1.500 edificios y mantenerlos es muy complicado', explicó.
Subrayó que de estos esfuerzos también se benefició Valdeorras, donde 'la Diócesis adquirió la capilla de San Francisco Blanco, en Outarelo, y mantiene el colegio Pablo VI. Son esfuerzos continuos. En O Barco hemos abierto una librería diocesana'. No faltó una referencia suya para el santuario bolés de As Ermidas. 'Está en proceso de restauración. Esperamos que con la declaración de bien de interés cultural las administraciones ayudarán', dijo. En todo caso, Lucio Ángel Vallejo continuará manteniendo contacto con la diócesis. 'Que no quepa la menor duda de que barreré para casa, para la tierra a la que uno le tiene cariño', aseguró.
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Dedicará los próximos días a ultimar su traslado al Vaticano. 'Esperamos hacerlo bien y no defraudar la confianza que el Papa ha puesto en mí', dijo, tras explicar que el 5 de octubre tendrá su primer contacto con Benedicto XVI.
La marcha de Vallejo Balda deja un sabor agridulce en Astorga. El obispo, Camilo Lorenzo Iglesias, resaltó la labor del ecónomo de la Diócesis en los últimos 20 años. 'Creo que lo puede hacer bien. Tiene mucha iniciativa y capacidad de administrar', dijo. Refiriéndose a su designación, añadió que 'la sentí mucho, por la escasez de sacerdotes y porque no es fácil encontrar un economista como él'.
