Álvarez Barreiro, alcalde vilamartinés: 'Nos quedamos sin niños, y sin niños no hay futuro'

Rubiá y Vilamartín rechazan en las calles el cierre de aulas

Decenas de personas (vecinos, alumnos, padres de alumnos y representantes políticos municipales) acudieron a sendas manifestaciones convocadas en Rubiá y Vilamartín, para expresar el rechazo a la decisión tomada por la Consellería de Educación de retirar entre uno y dos profesores en el caso de Rubiá y uno en el de Vilamartín, de los respectivos colegios de Infantil y Primaria (Virxe do Camiño y Manuel Folla Respino).
Ambas marchas dieron comienzo a la misma hora, las ocho de la tarde, aunque en el caso de Vilamartín se leyó el manifiesto al comienzo de la manifestación, que se desarrolló entre el colegio y el Concello, y en Rubiá los participantes iniciaron la marcha en el Concello para terminar en el colegio, donde se hizo la lectura correspondiente.

Maite Núñez, secretaria de la Asociación de Padres de Alumnos del colegio Virxe do Camiño, señaló en la lectura del manifiesto que 'os nosos fillos son o futuro de núcleos rurais como este e temos o mesmo dereito que as vilas e as cidades a contar cun ensino de calidade'.


TEMOR POR EL FUTURO

Una afirmación con la que coincidía el alcalde de Vilamartín, Enrique Álvarez Barrio, que tomó parte en la manifestación de su localidad y apuntaba que 'el recorte de un profesor ahora nos hace temer por el cierre del centro, si no hay colegio nos quedamos sin niños, y sin niños no hay futuro'.

El regidor señaló que 'he hablado con varios alcaldes de la comarca y que se encuentran en esta misma situación y todos estamos de acuerdo, tenemos que hacer algo porque, aunque estamos en crisis, esta reducción de prestaciones está haciendo imposible la existencia del rural' y llegaba a preguntarse si '¿la intención no será que desaparezcan estos pueblos?'.

La marcha de protesta en Vilamartín se abrió con la lectura del manifiesto, en el que Mónica Fernández, secretaria de la Asociación de Padres del colegio Manuel Folla Respino, quiso dejar claro que 'non estamos dacordo con que se prive aos nosos fillos dunha ensinanza de calidade, só porque non temos un número de alumnos matriculados suficiente. A Consellería trata aos nenos como simples números'.

La APA también fue rotunda a la hora de mostrar su decisión de oponerse 'a unha ensinanza de terceira, onde un profesor deberá impartir clase a tres cursos ao mesmo tempo, coa conseguinte merma na calidade'.

Ambas marchas mostraron su rechazo a los recortes de la Xunta en materia de Educación y contra el abandono de las poblaciones del rural, cuyo futuro depende, precisamente, de 'que os nosos fillos teñan unha ensinanza de calidade, coma a das vilas ou as cidades, dereito recollido na Constitución', señaló Maite Núñez.

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