Mariano Rajoy va camino de cumplir su promesa de terminar la legislatura con el mismo Gobierno que la comenzó. Eso supone que la ‘vicetodo’, Soraya Sáenz de Santamaría, no jugará en la liga local y no será candidata a la alcaldía de Madrid. ¿Pero a quien se le ocurrió la idea? Es muy posible que a alguien que no la quisiera bien. Políticamente, claro. La jugada es repetida: ya lo intentaron con María Teresa Fernández de la Vega y el resultado fue el mismo. A nadie se le ocurre pensar que la mujer con más poder del país lo va a perder mara meterse en la refriega municipal. Y menos que a nadie a su jefe Rajoy que no está dispuesto a perder su mano derecha, a desvestir un santo para vestir a otro.
