DEVOCIÓN RELIGIOSA

San Benito concentró a centenares de romeros en A Limia

Fieles portando la imagen de San Benito por las calles del exterior de la iglesia del pueblo de A Lampaza (MARCOS ATRIO)
photo_camera Fieles portando la imagen de San Benito por las calles del exterior de la iglesia del pueblo de A Lampaza (MARCOS ATRIO)

La romería más numerosa fue la de Parada do Outeiro (Vilar de Santos), donde los coches colapasaron las calles del pueblo.

San Benito congregó ayer a cientos de romeros en las iglesias de Parada do Outeiro (Vilar de Santos), Lampaza (Rairiz de Veiga), O Bouzo (Baltar) y Rebordachá (Xinzo).

La romería más numerosa fue la de Parada de Outeiro, donde los fieles acompañaron al patrón, conocido como "San Benito Preto' -la imagen se caracteriza por su tez negra-, considerado como uno de los más "milagreiros" para la curación de quistes y berrugas, así como otras impurezas de la piel.

Las calles de la localidad quedaban colapsadas de coches desde primera hora de la mañana, obligando a numerosos conductores a estacionar a lo largo de la carretera C-531 (Xinzo-Cortegada), que cruza por los alrededores del pueblo. La afluencia de vehículos y la falta de espacios para aparcar, obligó a la Guardia Civil de Tráfico a regular la circulación durante toda la mañana.

Los actos religiosos se sucedieron desde la nueve de la mañana y entre los asistentes había fieles procedentes de todos los puntos de la provincia e incluso de Madrid, Euskadi y Portugal. "Estamos de vacaciones de Semana Santa. Venimos desde Madrid, pero no es la primera vez que acudimos a la misa de San Benito. Tengo mucho que agradecer al santo", afirmaba una devota, María del Pilar Martínez, declinando dar detalles de los favores que le concedió el patrón.



Pies y manos de cera

La devoción en el santo de Parada de Outeiro se apreciaba en la misma entrada del templo, donde los romeros se agolpan en tres puestos ambulantes a la espera de comprar velas, algunas en forma de pies, manos y rostros, que posteriormente ofrecían al patrón, situado en un lateral del la iglesia de estilo románico.

La imagen de San Benito estuvo constantemente rodeada de personas, que intentaba tocarla con pañuelos, con los que después terminaban limpiando la cara.

La mismas escenas se repetían en A Lampaza, situada a menos de cinco kilómetros de Parada de Outeiro, aunque con menor afluencia de romeros, igual que en las iglesias de Rebordachá y O Bouzo.

La veneración a San Benito, que ya es considerado el patrón de A Limia, continuará hoy en el Monte da Uceira, en Sandiás, donde los actos religiosos se sucederán a lo largo de toda la mañana.

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