La joven Silvia Pazos recluta estos días entre sus vecinos de la localidad que la vio nacer, Laza, suscriptores para su nuevo proyecto editorial, en este caso bajo la fórmula del crowfunding.
La autora ourensana, licenciada en Historia del Arte, presenta su tercera obra, segunda en el género fantástico y enfocado a un público infantil-juvenil, "pero con un claro mensaje implícito en esta sociedad de consumismo en el que se le da demasiado valor a poseer".
Amaro sin mar, que así se titula el libro, que está ilustrado por la granadina Cristina Nogales, cuenta la historia de un marinero que nunca había visto el mar. Verá la luz si consigue las suscripciones suficientes, que son 150. Simplemente con introducir en un buscador el título, el lector hallará la opción de hacerse mecenas.
Buceando un poco, por esto del salmón que acaba guiando al amigo Amaro, en el libro, me recuerda al Principito. ¿Tiene cierta inspiración en él?
Yo escribo bastante parecido, mucha gente me dice que escribo un poco como Michael Ende. Realmente, sí, se trata también de una historia infantil que puede valer para adultos.
¿Cree que los niños de ahora entenderán que basta muy poco para vivir, como le ocurre a Naila?
Aunque está enmarcado dentro de la literatura fantástica para un público infantil, este libro tiene un claro mensaje de fondo. Entre sus personajes aparece una joven que no necesita prácticamente nada, y que acaba acompañando al protagonista en esa búsqueda del mar que nunca había visto. Es un poco un mensaje protesta, de crítica, porque hoy a un niño seguro que le cuesta entender que se pueda necesitar muy poco para vivir. No por tener muchas más cosas se está mejor, el tener algo nuevo es algo muy temporal. Estamos muy saturados de todo, pero no solo de pertenencias, también de estímulos, de conversaciones vacías.
Me sorprende que se cuente la historia de un marinero que nunca ha visto el mar.
No debe llamarte tanto a la sorpresa. Estoy convencida de que todos nosotros somos algo, y puede que muchos de nosotros todavía no lo hayamos descubierto aún. Parece un contrasentido, pero todos tenemos innatas unas cualidades, unas virtudes, unas destrezas que, de descubrirlas, nos harían ser los mejores en ello.
Es la tercera de sus publicaciones en solitario. ¿Las anteriores también están dentro del género infantil?
Yo diría que la línea es un poco difusa, aunque sí están dirigidos a ese público, tienen siempre un claro mensaje implícito. "O conto dos silencios" habla de cómo un elemento discordante dentro de una comunidad puede convertirse en una oportunidad para evolucionar. "A carreira de sacos" refleja una competición de animales en la que todos, todos, hacen trampa para ganarla.
