La Molinera se convirtió en un punto de encuentro entre expertos en robótica e impresión 3D. Es la primera vez que se celebra este foro, promovido por la concejalía de Promoción Económica
El movimiento maker, que buscan que sean los individuos quienes creen la tecnología a partir de sus propios medios, hizo parada en la ciudad. La Molinera se convertía en un punto de encuentro entre expertos de la cultura creativa procedentes de varias provincias. "Es la primera vez que hacemos una actividad de este tipo y ha sido un éxito. Durante el día se pasaron más de mil personas y muchos de otras provincias", destacó Jorge Pumar, concejal de Promoción Económica
Desde Madrid, el doctor en Robótica Juan González, conocido en las redes sociales como "Obijuan", acercó al público a la tecnología "FPGAs libres", que permite la fabricación de chips digitales, presentes en todos los dispositivos electrónicos, de una forma económica. Con sello ourensano, David Rodríguez, director de iNUBO.es, hizo un guiño a las administraciones para que se unan al movimiento "Open Data" y liberen datos e informaciones que custodian para su reutilización por parte empresas y ciudadanos.
El foro "Ourensemakerslab2016" es una iniciativa de la concejalía de Promoción Económica, que busca posicionar al espacio de La Molinera como un referente en la cultura maker. "Aquí está el futuro. Cuando éramos niños, entendíamos que la informática era el futuro. Dentro de unos años, un niño va a salir de su casa con unas zapatillas creadas a través de una impresora 3D.
Pensamos que esto es una utopía pero será una realidad por lo que tenemos que adelantarnos y posicionarnos ante las nuevas tecnologías", matizó Pumar. Exhibiciones a cargo del Club Aeromodelismo Ourensano, y expositores con impresoras 3D y videojuegos completaron la jornada, convirtiendo a La Molinera en un espacio en el que tanto expertos como novatos en robótica y economía colaborativa compartieron experiencias.
"Un día me entró el gusanillo porque vi que en la universidad hacían robots"
Rubén Espinosa es ingeniero de telecomunicaciones y su principal afición es la robótica. "Un día en el instituto me picó el gusanillo porque vi que la gente hacía robots en la Universidad de Alcalá", recordó el joven, de 27 años. Viajó desde Guadalajara para realizar una demostración con su robot de competición "Pumatrón". Anima a los más jóvenes a que prueben la experiencia. "Es un mundo que merece la pena porque está en auge y tiene bastante futuro. La tecnología es el futuro."
"La educación está mal planteada; se aprende más haciendo cosas que con un libro"
El ingeniero industrial Jesús Arroyo fue uno de los impulsores de la asociación estudiantil RESET de Escuela de Industriales de la Universidad Politécnica de Madrid, con el objetivo de poner en práctica los conocimientos adquiridos durante la carrera. "Nos dimos cuenta que salían ingenieros mejor preparados porque ya saben hacer cosas", apuntó. "Desde mi punto de vista, la educación está mal planteada. Se aprende mucho más haciendo cosas que simplemente con un libro", destacó Arroyo, de 27 años.
"La tecnología es un imán que engancha muchísimo a la gente más jóven"
Conocido como "Obijuán", el doctor en Robótica Juan González enseñó al público de La Molinera a fabricar chips digitales, "circuitos electrónicos negros, que están toda la tecnología que tenemos. Lo que antes costaba mucho dinero, ahora está al alcance de todos", matizó. Definió la tecnología como un imán, "que engancha muchísimo a la gente joven. Sus padres no saben manejarla y hay como un choque cultural que hace que les atraiga todavía más".
"Os datos que teñen as administracións pódense aproveitar para xerar valor"
David Rodríguez, director de iNUBO.es, afirma que cada vez son más las administraciones que se unen a la filosofía del Open Data, "que defende que os datos que estes entes teñen pola súa propia natureza, como os de tráfico ou censos, se liberen para que outras empresas ou a cidadanía os aproveite para facer aplicacións ou xerar valor", indicó. "As primeiras iniciativas xurdiron no País Vasco e na cidade de Zaragoza de 2010. En Ourense, non temos ningún caso. Fai falla vontade".
