Símbolo por antonomasia de la ciudad de Ourense, el Puente Romano, A Ponte Vella, iniciará 2016 con una decidida actuación de rescate
Símbolo por antonomasia de la ciudad de Ourense, el Puente Romano, A Ponte Vella, iniciará 2016 con una decidida actuación de rescate que persigue una rehabilitación integral, una empresa acorde con la importancia de tan emblemática infraestructura.
La labor de rehabilitación, que supone una inversión cercana al millón de euros, se llevará a cabo a lo largo de dos fases, cada una de las cuales contempla un abanico de acciones y mejoras puntuales, de cara a conseguir una mejora sustancial dentro de la totalidad del conjunto arquitectónico.
En la primera fase, se destaca principalmente la intervención sobre el pavimento existente así como la renovación de la iluminación presente en la actualidad.
El alumbrado contará con un sistema de luces que contempla una doble funcionalidad: por una parte supone una búsqueda estética, al resaltar la impronta de la obra, y, por otra, busca una mejora energética, haciendo más eficiente el consumo requerido.
Otra actuación contemplada dentro de esta primera fase constituye la retirada de la tubería que se encuentra adosada a la parte superior de la estructura.
En cuanto a la segunda fase de actuación, se reemplazarán las estructuras de metal existentes por sus equivalentes en piedra; se trabajará minuciosamente en la restauración de los pilares; se acondicionará un acceso peatonal existente bajo uno de los primeros arcos; y se instalará un cartel informativo a la entrada de la estructura., una serie de cambios que, una obra de esta importancia, precisa y merece.
