Las dificultades para asumir el impuesto de sucesiones, el principal motivo
Las renuncias a las herencias se han disparado en los últimos años a nivel gallego y también provincial, según los datos recogidos por el Centro de Información Estadística del Notariado. Si en 2011 eran 137 las personas que renunciaban a la herencia en Ourense, en 2013 pasaban ya a ser 168 y el pasado año superaban las 200 personas (222, en concreto). A nivel gallego, si en 2011 eran 1.051 los casos existentes, al año siguiente pasaban a ser 1.288, en 2013 eran 1.683 y el año pasado. 2.049.
Por otra parte, un informe de la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) revela que el 76 % de las unidades familiares ourensanas que reciben una herencia tiene "un importante quebranto en su economía" por el coste del impuesto de sucesiones y "el 32 % de los ourensanos que reciben una herencia deben pedir un crédito bancario o ayuda a la familia para afrontar ese gasto", según destaca su presidente, Benito Iglesias.
Dicho informe subraya que un ciudadano gallego paga 22 veces más que en autonomías con el impuesto de sucesiones rebajado, como es el caso de Madrid o Navarra. Es decir, un contribuyente que hereda dos pisos y 30.000 euros en efectivo, "paga en Galicia 27.000 euros frente a los 1.200 que tendría que tributar en la comunidad de Madrid", explica Iglesias. Esta brecha tributaria entre comunidades, según el presidente de Fegein, "atenta contra el principio constitucional de igualdad ante la ley, y de los derechos y deberes de los ciudadanos".
La mayoría de las personas que deciden desprenderse de los bienes que les corresponden por herencia lo hacen por no poder afrontar los gastos que ese legado les acarrea. En algunos casos, los impuestos que deberían pagar por recibir los activos de la persona fallecida resultan demasiado altos para la situación económica del heredero. En otros, cada vez más, tienen que renunciar a la herencia "porque la persona que ha muerto había contraído deudas que sus herederos no quieren o no pueden afrontar", explican desde la notaría María Teresa Fernández.
Curiosamente, Galicia se sitúa por encima de Madrid en cuanto al coste de los impuestos de Patrimonio y Sucesiones, a pesar de tener una renta per cápita bastante más baja que la de la comunidad madrileña, que vuelve a posicionarse como la que menos impuestos grava, a una distancia aún mayor que en años pasados, según la conclusión del Registro de Economistas Asesores Fiscales.
En cuanto a los tipos en la transmisión de inmuebles, los más bajos los tienen Madrid y Navarra, 6 %, y Canarias, 6,50 %. Los más elevados se aplican en el resto de comunidades autónomas, destacando Andalucía, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León y Extremadura con escalas del 8 % al 10 % (11 % en Extremadura). Galicia y la Comunidad Valencia aplican un tipo único del 10 %.
Muchas personas que reciben un inmueble en herencia, junto con una par de fincas y dinero, pueden encontrarse -debido a lo elevado de los impuestos- con que deben vender las fincas y aportar el dinero heredado para mantener la casa en propiedad. Un problema creciente, a la espera de un cambio en la ordenanza fiscal autonómica.
