Consiguen impulsar la natalidad en algunos municipios, pero el alto número de fallecimientos desequilibra las cifras
En los últimos años muchos ayuntamientos de la provincia han adoptado medidas para fomentar la natalidad, para captar nuevos vecinos o para estabilizar la población. Por un lado pretenden, fijar población y por otro, salvar servicios e infraestructuras que, como los colegios, pueden cerrar por falta de alumnos, aunque la caída de la población, debido al número de fallecimientos, es de momento imparable.
Concellos como A Merca, Cartelle y A Bola en los últimos años impulsaron la apertura de escuelas infantiles, para facilitar la conciliación laboral y familiar. A Bola, además, lanzó en noviembre de 2013 un plan de dinamización socioeconómica, que prevé ayudas a emprendedores (una beca de 5.000 euros), asesoramiento e información a parejas que quieran instalarse en el municipio. Las medidas suscitaron el interés de seis parejas, que optaron por asentarse en el municipio, y tres emprendedores en los sectores del turismo, la educación y la agricultura ecológica estudian esta opción.
Un concello que mima la captación de emprendedores es Allariz. Asesora y facilita las gestiones a los que quieran asentarse en su término, especialmente si están ligados a la dinamización del medio rural. Esto supuso en los últimos años la creación de nuevas explotaciones ganaderas de carne de buey y de leche ecológica y surgieron nuevos agricultores, productores de jabón de leche de burra, cerveza artesana, miel o castañas.
Pontedeva puso en marcha en el año 2008 una ayuda a la natalidad de 600 euros para los niños que se inscriban en registro civil municipal. La ayuda se distribuye en cuatro anualidades de 150 euros cada una. En los últimos años, la media de nacimientos anual ha sido de 4 niños, en un concello con 644 habitantes.
Bande aprobó en 2007 una ordenanza de ayuda a la natalidad por el cual, el Concello da 1.000 euros a cada recien nacido que se registre, que se reparte en dos anualidades. A mayores, desde hace tres, el Concello también sufraga el gasto de la escuela infantil. El alcalde, Antonio Armada, señala que “os datos da natalidade melloraron, aínda que non son para tirar cohetes. Temos unha baixada importante de poboación, debido a cantidade de fallecementos e iso se nota no cómputo xeral” . La media de nacimientos registrados en los últimos cinco años es de 7 niños.
Boborás incentiva la natalidad con ayudas para las familias que no superen los 9.000 euros de ingresos anuales. En el momento del nacimiento, la familia recibe 250 euros y después 25 euros al mes durante dos años. La campaña se inició en el 2007 y desde entonces el Concello pasó de no superar los cinco niños al año, a contar con 14 nacimientos en 2012 y 11 en 2013. .
Os Blancos (1.030 habitantes) decidió este año dar ayudas que pueden llegar hasta los 900 euros. De ellos, 400 son para las parejas que tengan un niño, dinero que sería entregado nada más nacer el bebé. El resto es para la compra de material escolar, alquiler de viviendas y transportes públicos.
Ríos realizó un censo de viviendas vacías en 2012 para que sus dueños las alquilaran y así atraer vecinos, aprovechando las obras de AVE en los municipios limítrofes de A Gudiña, Castrelo do Val y Laza. Durante este tiempo fueron alquiladas dos de las casas y se n egocia el alquiler de otras tres.
El Concello de Larouco entrega 600 euros a la familia de cada recién nacido del Concello. El alcalde, Joaquín Prieto Rodríguez, confirmó ayer la concesión de esta ayuda, si bien no se mostró demasiado optimista respecto a su resultado. “Non sirve de axuda”, comentó el regidor.n
Otro concello que también intenta frenar la despoblación subvencionando a los niños es el de O Bolo. Premia con 100 euros anuales por hijo a aquellas familias que tengan más de cuatro. Recibirán esta ayuda hasta que cumplan los 18 años. Esta novedad ya fue recogida en el presupuesto de 2014, que también contempla la entrega de 542 euros por el primer hijo, 721 por dos y 901 por tres.
