Hace 16 meses el alcalde de Os Blancos, Xosé Manuel Castro, se hizo una fotografía delante de una nave industrial en construcción con el responsable de la empresa que iba a instalar en la localidad una planta de biomasas destinada a la producción de pellets. Insunor, la empresa, avanzó que crearía una decena de puestos de trabajo. Contaba con el aval de la Xunta -el
entonces delegado territorial en Ourense, Rogelio Martínez, también aparece en aquella foto-.
La financiación pública, más de 200.000 euros a través de la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural, aportó el 40% del presupuesto inicial. La nave se terminó, pero la empresa no se decide a comenzar la actividad. El alcalde no sabe qué pasa.
Esperando desde mayo
"Dixeron que abrirían en maio deste ano, pero levamos casi tres meses de retraso", recuerda Castro. "Hoxe mesmo volvín a preguntar polo asunto á empresa e a resposta que me deron foi que a canle de comunicación con nós está rota", confesó ayer.
El alcalde advierte que el concello dio "todas as facilidades" a Insunor, como por ejemplo rebajas en las licencias y en el precio de los terrenos. Pero constata que todavía no ha empezado el proceso de selección para los puestos -"serán tres ou catro", supone- que debería crear la fábrica de pellets en un municipio sin apenas industria.
